¿Qué productos financieros me interesan según mi profesión?
Tener una estabilidad laboral durante la crisis ha sido y sigue siendo una cuenta pendiente en España. Aunque los datos económicos que van saliendo a la luz hacen pensar en el inicio de la recuperación del país –reactivación del mercado hipotecario, caída de la morosidad o disminución de la deuda de las familias-, lo cierto es que en España y según los últimos datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social relativos a febrero de 2015, hay 4.512.153 personas desempleadas.
Si se es un trabajador que tiene la posibilidad de ingresar una nómina cada mes o bien si se tienen ingresos mensuales, resulta conveniente saber cómo sacarle partido al máximo a ese sueldo. Se establece entonces una relación necesaria entre entidad bancaria y cliente ya que para la entidad recibir ingresos mensuales es interesante, como también lo es para el cliente poder contratar y disfrutar productos con las mejores condiciones.
¿Qué cuenta solicito si soy mileurista?
Concepto que hoy día es todo un logro para muchos. Llegar a cobrar en torno a los 1.000 euros y administrarlos de tal manera que “lleguen para todo”. Una tarea que puede ser una difícil maniobra y para la que siempre ayudará disponer de los instrumentos bancarios más atractivos ya sea para un trabajador por cuenta ajena o para un autónomo. En este caso, lo ideal es disponer de una cuenta bancaria sin comisiones, esos pequeños importes que poco a poco van agotando nuestros ahorros e incluso nuestra paciencia por realizar operaciones habituales con nuestra cuenta.
Domiciliar la nómina o bien realizar ingresos mensuales por una determinada cantidad es la vía para no soportar comisiones, que según un informe de Facua pueden ser de hasta 168,73 euros al año para el cliente medio. Cuentas como la Cuenta Nómina de ING Direct, la Cuenta Inteligente de EVO Banco o la Cuenta Nómina de Bankinter son buenos ejemplos de cuentas sin comisiones y además interesantes ventajas.
¿Y si soy autónomo?
Cuando puede que los ingresos no sean regulares y no se disponga de una nómina como tal, las ventajas de las cuentas nóminas peligran, y puede que ese sea el caso para los autónomos. Sin embargo, también hay cuentas que no requieren de la domiciliación de una nómina sino que con realizar un ingreso periódico por un cantidad concreta también se puede beneficiar de las ventajas de una cuenta sin comisiones, como es el caso de la Cuenta Sin Nómina de ING Direct.
Además el hecho de ser autónomo también puede conllevar limitaciones a la hora de obtener financiación. En cambio –y por suerte- hay opciones para obtener líneas de financiación con las que el hecho de ser autónomo no supone una barrera sino una condición que favorece, como es el caso de Spotcap, una compañía que facilita financiación a autónomos, Pymes y negocios online.
¿Si soy funcionario me interesa algún producto concreto?
Ser trabajador del Estado implica tener una nómina fija cada mes. Este perfil de trabajador, el del funcionario, es verdaderamente atractivo para las entidades financieras y por ello éstas son capaces de ofrecer productos con mejores características que las habituales para ellos tanto a nivel de ahorro como a nivel de financiación. Este último punto es interesante ya que por ejemplo existen hipotecas a las que los funcionarios pueden optar con mejores condiciones que las del resto de clientes y que no se publicitan como el resto, con tipos de interés más ajustados.
Además, el tipo de funcionario también influye porque para las entidades financieras no es lo mismo un juez que un maestro o que un policía, la oferta varía según el gremio. Será necesario acudir a la oficina a informarse de la existencia de este tipo de ventajas.
De cara al ahorro y desde un punto de vista tradicional, también puede ser interesante un plan de pensiones ya que se podrán programar mejor las posibles aportaciones periódicas. La estabilidad laboral es una muy buena carta de presentación para las entidades financieras que tienen en cuenta al máximo a la hora de ofrecer productos y servicios.