Al consumo le cuesta despegar

La industria de alimentación y bebidas creció un 2,6% en 2014 y elevó el empleo un 1,8%. El crecimiento del sector representa el mejor dato no ya desde el inicio de la crisis, sino desde 2005, según el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE). Y es significativo por lo que puede representar de recuperación del consumo de los hogares en este tipo de productos. Hasta el punto de llevar a decir al director general de la patronal FIAB, Mauricio García de Quevedo, que “hemos sido impulsores del cambio de ciclo de la economía española”. Lo cierto es que uno de los pilares fundamentales en los que se basa este crecimiento es el de la exportación, de la mano de una muy apreciable internacionalización de las empresas y su entrada en nuevos mercados. Porque la demanda interna, en realidad, solo creció el 1% en 2014, y aunque esté en la senda de la recuperación, aún es débil. Así lo demuestra el informe Balance y perspectivas de gran consumo 2015, según el cual la venta de alimentos para el hogar ha caído, tanto envasados como frescos. El sector, que agrupa además droguería y perfumería, retrocedió un 2,9% en valor –por las bajadas de precios– y un 1,8% en volumen y, aunque menos, la previsión es que en gran parte también bajen este año. Frente a esta debilidad aparece una señal de confianza: la inversión publicitaria; según el informe i2p, prevé crecer cerca del 6% este año.