Evo Banco plantea un ERE que los sindicatos cuantifican en unos 500 empleos
El fondo Apollo, dueño de Evo Banco, tiene previsto realizar un importante expediente de regulación de empleo (ERE). Según fuentes sindicales, conocedoras de los planes del banco calcula en unos 500 empleados del grupo, incluida la plataforma Altamira, los que se pueden ver afectados. El proyecto es cerrar parte de las 75 oficinas que tiene Evo Banco y operar más con un call center, explican los sindicatos. Un portavoz del banco asegura que la cifra de salidas será mucho menor. Las negociaciones se inician el día 19.
En menos de un año el fondo de inversión estadounidense ha decidido dar un giro radical a Evo Banco, la entidad financiera adquirida a Novagalicia hace algo más de un año, aunque la operación fue autorizada hace solo 10 meses. La compra de esta pequeña entidad financiera por Apollo creó un precedente en España, ya que se convirtió en el primer fondo de inversión dueño de un banco en el país.
El proyecto de la firma americana era operar con una red muy limitada en España y con un horario muy amplio. Además, quería volcarse en un escaso abanico de productos muy sencillos, que pudiesen contratarse por internet o el móvil sin complicaciones.
A este banco se le unirían otras filiales para completar sus servicios, como una financiera de crédito al consumo, en este caso, Finanmadrid (adquirida a Bankia), actual Fracciona, y una sociedad de tarjetas, como AvantCard, adquirida el viernes pasado a Apollo, y ahora integrada en el grupo Evo.
La sorpresa ha sido la noticia comunicada la semana pasada a los sindicatos de realizar una “importante” reducción de plantilla del grupo, una vez completada la integración de estas las dos filiales, explican fuentes sindicales citando una reunión llevada a cabo la semana pasada donde el banco explicó parte de sus nuevos planes.
El proyecto de Apollo pasa ahora por reducir costes y estructura operativa de Evo Banco, razón por la que ha planteado un ERE que, según los sindicatos afectará a unos 500 empleados del grupo, de un total de 1.200 trabajadores, es decir, al 41,6% del conjunto de la plantilla, aunque habría que sumar también algunas salidas de Altamira, explican las mismas fuentes dicatos, que aseguran que la empresa ya les ha comunicado algunos de los cambios, algo que niega el banco. Un portavoz del banco, sin embargo, aseguran que la cifra de salidas será muy inferior.
Apollo también cuenta con la plataforma de gestión de activos inmobiliarios adquirida a Santander, Altamira, en la que la reducción de plantilla prácticamente será marginal, explican fuentes sindicales.
La dirección de Evo Banco ha convocado a la representación de los trabajadores del banco a una reunión en la que ya se iniciarán las negociaciones de las condiciones del ERE para el próximo 19 de diciembre. En un comunicado emitido el pasado día 5 de diciembre Evo Banco explicaba que “inicia este proceso, en el que buscará el menor impacto laboral posible, con el convencimiento de que las actuaciones que se acuerden ayudarán en el medio plazo a construir un proyecto sólido, diversificado y basado en un modelo de crecimiento orgánico e inorgánico”.
Fuentes sindicales aseguran, sin embargo, que ya la semana pasada el banco les comunicó su intención de cerrar más oficinas del grupo financiero en España (ahora 75 tras cerrar nueve en los últimos meses). El objetivo es dar otra vuelta de tuerca a la red de Evo para transformarlo en un banco similar a INGDirect, y operar más por canales alternativos a la sucursal, para lo que mantendrán la plantilla ubicada en los servicios centrales y en el call center. El viernes pasado, Evo Banco anunció la compra de Avant Tarjeta, financiera especializada en la gestión de tarjetas de crédito que opera en España e Irlanda bajo la marca AvantCard. Esta compra se suma a la de Fracciona en agosto, ambas adquiridas a Apollo. Con esta operación, Evo adquiere en España una cartera de 111.000 clientes, con un volumen crediticio de 175 millones de euros y una plantilla de 264 empleados, que se suman a los casi 600 de Evo Banco, y a los más de 300 de Fracciona.
Informe técnico de Abanca
Evo Banco fue creado como marca comercial por NCG Banco el 12 de marzo de 2012 para operar en España excepto en Galicia, Asturias y la provincia de León, justo en las zonas donde la firma gallega podía mantener su red tras recibir ayudas públicas por más de 8.000 millones de euros. El objetivo era salvar parte de las oficinas de fuera de la zona estratégica de Novagalicia de su cierre y por lo tanto de despedir a su plantilla. En septiembre de 2013, Evo Banco fue vendido al fondo de inversión estadounidense Apollo Global Management, el cual pasó a hacerse cargo de la entidad en febrero de 2014, tras obtener las autorizaciones pertienentes. Una de las peculiaridades de este pequeño banco es que abre mañana y tarde, y cuenta con dos productos estrella muy sencillos, primero fue el depósito creciente, y ahora es la hipoteca. El objetivo de Apollo es completar los servicios financieros que quiere ofrecer en España con la compra de una aseguradora, aunque ha adquirido una recientemente en Portugal.
Novagalicia (ahora Abanca), adquirida en diciembre de 2013 por el venezolano Banesco, también se encuentra en la actualidad en negociaciones con los sindicatos, en este caso prentende abrir más oficinas por la tarde (algo que la plantilla considera poco rentable), y reducir ciertos complementos y pagas del salario. La plantilla de Novagalicia ha pasado ya por cuatro ERE desde que fue nacionalizado en 2012. Abanca, de hecho, entregó ayer a los sindicatos un informe técnico que se basa en criterios de eficiencia y con el que ve justificados los cambios organizativos y salariales que pretende aplicar en la plantilla, integrada por unos 4.800 trabajadores.