Pedro Sánchez rechaza la jornada de 35 horas

"Me gustaría que Podemos definiese su ideología. Si es anticapitalista o socialdemócrata" "Vamos a plantear la reforma de las pensiones para volver al modelo anterior"

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha propuesto hoy una rebaja de las cotizaciones sociales que soportan los empresarios y ha rechazado la propuesta de Podemos de fijar la jornada laboral en 35 horas frente a las 40 actuales. Durante su intervención en el Foro Cinco Días, patrocinado por Accenture y Banco Sabadell, el líder socialista ha advertido que la clase media “está en peligro”. Estos son los principales temas que ha tratado Sánchez:

Mercado laboral

El secretario general del PSOE propone reformar el Estatuto de los Trabajadores para amoldar la legislación a la situación del mercado. Para Sánchez, la propuesta de rebajar de 40 a 35 horas la jornada laboral realizada por Podemos resultaría contraproducente. En su opinión, uno de los graves problemas actuales es que muchos empleados son contratados a tiempo parcial y trabajan a tiempo completo. Respecto al contrato único, el líder socialista se mostró contrario a implantarlo, aunque reconoció que deben reducirse el número de modalidades de contratación. Sánchez aseguró que es necesario poner fin a las rebajas salariales y defendió elevar el salario mínimo hasta equipararlo al 60% del sueldo medio. Abogó por ganar competitividad a través de la depreciación del euro. “Hay que acabar con la devaluación interna y apostar por la externa”, señaló.

Pensiones

Pedro Sánchez defendió modificar la reforma de las pensiones que aprobó el Gobierno de Mariano Rajoy y apostó por alcanzar un nuevo consenso. Una de las principales críticas es que la revalorización de las pensiones se aplica de forma general y sin discriminar por su cuantía. Defendió que si llega a la Moncloa, las pensiones mínimas crecerán más que las medias y máximas.

No obstante, defendió que la edad de jubilación se sitúe en los 67 años para hacer sostenible el sistema y abogó por buscar vías alternativas para la financiación de las pensiones. En su opinión, es factible que los recursos procedan de otras vías como los impuestos y no solo de las cotizaciones. De hecho, defendió una rebaja de las cotizaciones que pagan los empresarios, una de las principales reclamaciones de la patronal.

Reforma fiscal

“Los ricos no pagan el IRPF, crean sociedades patrimoniales”. Pedro Sánchez defendió un incremento tributario a las rentas altas y elevados patrimonios. En este sentido, propuso equiparar la tributación del trabajo y de las rentas del capital. “El IRPF es el impuesto de la nómina de las personas físicas”, criticó. En su opinión el tributo debería contemplar más conceptos para grava a los grandes patrimonios.

Sánchez, que señaló que cambiar el sistema fiscal español es la gran reforma estructural pendiente. En este sentido, exhortó a las grandes empresas a contribuir al sostenimiento de los servicios públicos. Lamentó que empresas del IBEX puedan hoy tributar a tipos inferiores a una pyme. “No hay responsabilidad social sin responsabilidad fiscal”. Defendió que, como mínimos, las grandes corporaciones tributen al 15%.

Duplicar el gasto en educación

Respecto al gasto público, el líder socialista fijó como una de sus prioridades elevar el gasto en educación. Prometió que si es elegido presidente en las próximas elecciones generales que se celebrarán en 2015 aumentará en dos legislaturas el gasto en educación del 3,5% del PIB vigente al 7%.

Si bien apostó por elevar el gasto público, también defendió el principio de estabilidad presupuestaria y aseguró que el PSOE no cuestiona el pago de los intereses de la deuda pública, aunque sí piden que familias y autónomos puedan reestructura su endeudamiento.

Sánchez no defendió la derogación del artículo 135, que consagra el principio de estabilidad presupuestaria en la Constitución, aunque reclamó incluir en ese precepto el blindaje del Estado de bienestar.

Guiños a posibles pactos sobre el PP

Ante la pregunta de si el PSOE vería con buenos ojos un pacto con el PP para garantizar la estabilidad institucional, Sánchez recordó que plantear fórmulas de Gobierno con distintos apoyos parlamentarios no es malo. “Lo pésimo son las mayorías absolutas”. Recordó que en España lo más habitual es gobernar en minoría y con apoyos de otros grupos. Sobre el fenómeno Podemos, el líder socialista tiró de ironía: “Me alegra que reconozcan a la socialdemocracia como receta para salir de la crisis”, señaló sobre el programa que presentó Podemos la semana pasada y que rebaja varias de sus propuestas iniciales. De hecho, Sánchez reclamó a la formación política liderada por Pablo Iglesias que explica por qué reniega de parte del programa con el que obtuvo más de un millón de votos en las pasadas elecciones europeas.