_
_
_
_
El éxodo laboral de los jóvenes

La aventura de ejercer como dentista fuera de España

Publicada la primera guía con consejos prácticos para aquellos odontólogos que decidan emigrar

Un paciente tratado en una clínica odontológica.
Un paciente tratado en una clínica odontológica.Cinco Días

Karies (caries en alemán), glazuur (esmalte en holandés), orthodontics (ortodoncia en inglés) son algunas de las palabras a aprender por aquellos dentistas que decidan probar suerte fuera de España. Aparecen recogidas en un glosario incluido en la Guía del Departamento Internacional del Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de la zona que comprende la comunidad de Madrid y las provincias de Ávila, Toledo, Guadalajara, Ciudad Real y Cuenca. Se presentó este miércoles en el salón de actos de dicha institución. Casi doscientos colegiados - en su mayoría jóvenes- acudieron a la cita.

El 22% de los titulados entre 2010 y 2012 estaba en paro, según el Colegio

El manual, que va por su segunda edición, busca ofrecer información a dudas como cuáles son los requisitos y la documentación necesaria para poder trabajar, qué nivel de idioma se exige, cuál es la oferta de empleo existente o cuáles son las condiciones laborales y fiscales que se van a encontrar los que decidan emprender la aventura.

“Muchos habíamos intentado marcharnos y no encontrábamos información. Yo estuve una semana yendo del Ministerio de Sanidad al de Educación, a la universidad y nadie sabía nada”, recuerda Estefanía Moreno, una de las coordinadoras de la guía y vocal de la actual junta de gobierno del Colegio para explicar cómo surgió la idea.

De entre los 17 países incluidos –15 europeos más Estados Unidos y Australia– Moreno asegura que los mejores destinos son Suiza y Australia. “Tienen unas condiciones de trabajo estupendas y muchas prestaciones sociales. Además, necesitan profesionales odontológicos”. La mayoría de los que emigran están optando, sin embargo, por Francia, Reino Unido y Holanda. “Las exigencias de visado y lingüísticas son menores”, afirma.

El número de los que opta por ejercer en el extranjero ha aumentado en los últimos años, según los datos de los que disponen en el Colegio. “En lo que va de 2014 ya se han dado de baja como colegiados en nuestra institución 165 personas. En 2013 fueron 130. El año que viene serán 200”, se lamenta Moreno. Estas cifras solo son válidas para aquellos que se colegiaron. Muchos titulados ni siquiera llegan a hacerlo, a pesar de que este es un requisito imprescindible para trabajar en España. "Salen de la facultad ya con la idea de marcharse fuera".

La pregunta que surge ante este fenómeno es por qué se van. Una de las respuestas la ofrece el informe El problema de la inserción laboral de los dentistas, publicado también por el Colegio: el 22% de los licenciados entre 2010 y 2012 estaba en paro. Entre 1992 y 2005 el desempleo era, sin embargo, prácticamente inexistente en el sector. El problema parece que irá en aumento. El Consejo Dental Europeo prevé que dentro de 10 años haya en España un 43% más de dentistas de los que se necesitan.

El número total de plazas ofertadas en el curso 2012-2013 fue de 850

Entre las causas, la proliferación de profesionales en los últimos años. Entre 2001 y 2010 se titularon un 44% más de odontólogos, según recoge un estudio del Consejo de Dentistas de España. El mismo informe muestra que el número total de plazas ofertadas en el curso 2012-2013 fue de unas 850, de acuerdo con los datos del Ministerio de Educación. Ese año existían 20 facultades de Odontología, 12 pertenecientes a universidades públicas y 8 privadas.

"Hay una ausencia total de regulación en el sector. No hay, por ejemplo, un número máximo de dentistas por población como en el resto de Europa. Cada vez abren más universidades y no hay un control del número de alumnos", critica Moreno. "A esto hay que sumarle que en España el 40% de la población solo nos visita cuando tiene dolor", añade.

Otro motivo de queja del Colegio de Odontólogos es la proliferación de clínicas low cost, que ofrecen servicios a un precio muy inferior de lo que era habitual en el mercado. Y es que en España -señalan-, a diferencia de otros países de su entorno, no existe una fijación de precios máximos o mínimos.

Algunos de estos centros no están dirigidos por profesionales sanitarios, sino por empresarios, según denuncia el Colegio en su campaña Tu boca no está de oferta, con la que quieren poner coto al intrusismo profesional. "Especialmente en la situación de crisis en la que nos encontramos, recomendamos prestar especial atención a los tratamientos que se ofertan con un precio excesivamente bajo, porque es posible que se están realizando con materiales de mala calidad o incluso que supongan un riesgo para la salud", advierten.

"Además, para abaratar costos, muchas de estas clínicas están utilizando a estudiantes recién salidos de la carrera a los que no pagan, a veces, ni el salario mínimo", recuerdan.

“A ver a dónde emigramos”. “Yo ya volví de Austria. Estuve dos meses. Igual vuelvo”. “Ahora estoy aprendiendo francés”. “Yo me quiero pirar también. A cualquier país”, comentaban entre sí algunos de los asistentes a la presentación de la guía. Un reflejo resignado de la situación a la que tienen que enfrentarse.

Archivado En

_
_