“No se puede tirar del gasto con medidas populistas”
Fernández Currás defiende que las cuentas de 2015 recogen ya la política fiscal en la que cree el Gobierno "Hay que proteger el Estado de bienestar, pero hay que hacerlo para hoy y dentro de 20 años" La secretaria de Estado de Presupuestos niega que se hayan inflado las estimaciones de recaudación
En función del calendario electoral que determine el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2015 pueden ser los últimos de la legislatura. Para Marta Fernández Currás (Vigo, 1963), secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos, las cuentas del próximo año contemplan la política económica y fiscal que el Ejecutivo siempre quiso implementar y que no pudo realizar hasta ahora por el elevado déficit público. “El Gobierno baja impuestos cuando puede y debe hacerlo”, señala Fernández Currás, que asegura que los Presupuestos son realistas y rechaza que las previsiones de ingresos tributarios pequen de optimistas.
Los Presupuestos de 2015 incluyen por primera vez el efecto de una rebaja significativa de impuestos. ¿Que ello suceda en año de elecciones es una mera coincidencia?
La ejecución del programa electoral también tiene sus tiempos. Hay que encontrar las condiciones óptimas para hacerlo cumplir. Lo importante es que hemos sido capaces de demostrar en los Presupuestos Generales de 2015 la política económica que el Gobierno siempre quiso hacer. Primero tuvimos que arreglar lo anterior.
¿Habla de la herencia recibida?
“Nos preocupan las rebajas tributarias de las regiones en la medida en que no cumplan el déficit”
Yo entiendo que es un término muy manido. Pero había que buscar los millones para pagar lo que se debía. Todos los ciudadanos reclamamos tener más renta disponible en el bolsillo, pero primero era pagar al proveedor que estaba esperando dos años y medio a que le abonaran una factura por un servicio ya prestado. Cuando hemos puesto todo eso en orden, estamos en condiciones de que la economía nos acompañe para hacer la política fiscal que queremos. ¿Esto coincide con el final de la legislatura? Sí, pero es el tiempo que nos ha llevado arreglar la situación.
El Gobierno calcula que la rebaja fiscal ahorrará 9.000 millones a los contribuyentes. Sin embargo, que se cumpla esa cifra depende en parte de lo que hagan las comunidades en el tramo autonómico del IRPF.
El cálculo del Gobierno está hecho con el impacto de la rebaja sobre la tarifa estatal que ha de completarse con las comunidades autónomas. La propia Ley del IRPFcontempla una tarifa supletoria para el supuesto de que la comunidad no adopte una propia. El cálculo es el más conservador y se hace con la hipótesis de que las comunidades autónomas no aplicarán una escala propia. A partir de ahí, la corresponsabilidad fiscal no la podemos adivinar. Puede que algunas bajen impuestos y otras los suban. El efecto será más o menos neutro.
Una de las autonomías que ha avanzado que bajará el impuesto sobre la renta es la Comunidad Valenciana, que probablemente incumplirá también este año el objetivo de déficit. ¿Le preocupan las reducciones tributarias que se están anunciando?
Nos preocupa en la medida en que no cumplan el déficit. Por algo hablamos de corresponsabilidad fiscal. El Gobierno baja impuestos porque debe hacerlo y puede. Yo espero de todos los gobernantes autonómicos la misma responsabilidad.
Teniendo en cuenta que en julio las comunidades ya alcanzaron el objetivo de déficit para todo el año del 1%, ¿cree que el riesgo de incumplimiento es muy elevado?
"Las pensiones crecerán al 0,25%. La buena noticia es que se pueden actualizar"
Confío en que sean capaces de reconducir el gasto. Las comunidades que incumplieron tienen un plan de saneamiento, y con medidas extraordinarias.
Las cuentas en el papel siempre se cumplen, pero ello no se traslada a la realidad.
La Ley de Estabilidad Presupuestaria tiene muchas herramientas para reconducir esa situación.
¿Se aplican esas herramientas?
Sí; la ley establece una gradualidad antes de llegar a medidas coercitivas y sancionadoras. Y esa gradualidad la está ejerciendo este Gobierno con seguimiento, información y control.
Teniendo en cuenta la mejora de la economía y la menor presión de los mercados, ¿estos son los Presupuestos más sencillos que ha elaborado durante la legislatura?
Comprenderá que le conteste que la elaboración de un documento de la importancia y magnitud de los Presupuestos Generales del Estado nunca resulta tarea fácil. Es cierto que nada tiene que ver la situación que vivimos hoy con la que nos encontramos a principios de 2012, cuando elaboramos el primer Presupuesto. Entonces teníamos una situación de desconfianza hacia nuestras finanzas debida a una desviación sustancial en 2011 respecto del déficit comprometido, los mercados financieros prácticamente cerrados, un sistema financiero colapsado… Eran unos Presupuestos muy complejos, casi de supervivencia, en los que teníamos que recuperar todo lo perdido.
"Este Gobierno ha sido muy fiable con sus previsiones macro y también con los ingresos"
¿No cree que se da mucha más publicidad a la presentación del Presupuesto que a la ejecución y liquidación del mismo? ¿Que se habla mucho más de lo que dice el Gobierno que gastará e ingresará y no tanto de lo que gasta e ingresa realmente?
Yo comparezco periódicamente dando cuenta de la ejecución presupuestaria. Más allá de mi discurso, publicamos una información amplia sobre la ejecución de todas las variables. Se le da mucha importancia. Más transparencia no se le puede pedir a un país. Y cuando hay una desviación de lo proyectado se requiere una modificación presupuestaria que debe ser aprobada por las Cortes y es pública.
¿El presupuesto de ingresos para el próximo año es demasiado optimista?
El presupuesto de ingresos es una previsión que está muy ligada al crecimiento nominal estimado en cuadro macroeconómico. A veces se cumplen las estimaciones macro y a veces no del todo. Este Gobierno ha sido muy fiable con sus previsiones macro y también con los ingresos. Quiero decir que no nos hemos encontrado una desviación de cuatro puntos porcentuales en crecimiento y gastos.
En los últimos tres ejercicios, incluido el avance de liquidación de 2014, la recaudación siempre ha sido inferior a lo presupuestado. Solo se cumplió el primer año porque se adoptaron subidas fiscales a mitad del ejercicio. ¿Por qué cree que en 2015 será distinto?
Respecto a este año, la menor recaudación del impuesto sobre sociedades ya se identificó en el mes de marzo y así lo comunicamos en el Programa de Estabilidad. Honestidad absoluta. No es posible acertar al 100% en todas las figuras tributarias. ¿Por qué creer en la cifra de previsión? Porque estamos viendo en la recaudación de este año que la evolución de los ingresos es muy superior al que marca la economía. Y esto no puede ser una mera casualidad.
¿Cuál es el motivo?
Se han hecho reformas estructurales y adoptado medidas en la lucha contra el fraude. Se han regularizado rentas que estaban ocultas. Basta ver el volumen de bases imponibles que se ha puesto de manifiesto con la declaración especial. Todo eso ha pasado a formar parte de la riqueza nacional y recordemos que en el IRPFse declara por la renta mundial.
Otra cifra que ha sorprendido es la recaudación por cotizaciones de los ocupados. Aumentará por encima del 8% cuando los salarios no subirán prácticamente y el crecimiento del empleo no alcanzará esos porcentajes.
"El de 2015 es el primer Presupuesto que no incluye obligaciones de pago de ejercicios anteriores"
Además del incremento de afiliados, que es el mejor registro para medir cómo se comporta el empleo, hay que tener en cuenta efectos importantes como es el cómputo de las retribuciones en especie en la base de cotización de la Seguridad Social. Esta medida ha entrado en vigor en septiembre y, por lo tanto, en 2015 el efecto alcanzará el año entero. También contamos con un instrumento muy potente que es el Plan de Garantía Juvenil con un importe de 470 millones.
¿El Presupuesto se ha realizado bajo la hipótesis de que no se prorroga la tarifa plana en las cotizaciones y que, en principio, caduca en diciembre de este año?
El Presupuesto contempla las dotaciones de gastos y previsiones de ingresos conforme a la normativa que resulta de aplicación en el momento de su elaboración, como no puede ser de otra forma. Pero es importante destacar que el presupuesto ni supone ninguna decisión respecto a esta cuestión en concreto ni tampoco la determina ni la condiciona. La decisión sobre la aplicación de la tarifa plana en las cotizaciones se adopta en los foros correspondientes, ajenos al Presupuesto, sin que este afecte para nada a ese proceso.
Hacienda devolverá a los funcionarios el 25% de la extra suprimida en el año 2012. ¿Ello no implica simplemente cumplir sentencias que obligan a abonar los 44 días devengados antes de la suspensión de la paga?
No hay ninguna sentencia que obligue al Estado y no se ha pronunciado el Tribunal Constitucional. La propia norma ya preveía que en 2015, conforme el crecimiento económico lo permitiese, se repondría la paga extraordinaria. Y esto es lo que en este momento nos parece lo más adecuado.
¿Hay margen para aprobar una dotación extraordinaria para los parados que han agotado todas las prestaciones?
El Presupuesto siempre tiene margen para los parados que han agotado las prestaciones. Para el desempleo siempre hay margen, siempre. Salvo éste, todos los Presupuestos se han ejecutado con un crédito extraordinario para el Servicio Público de Empleo Estatal. Los mayores de 45 años con cargas familiares tienen derecho a dos prestaciones consecutivas y, además, está el Plan Prepara.
¿Es posible elevar durante el trámite parlamentario las pensiones por encima del 0,25% previsto para el próximo año?
Las pensiones crecerán al 0,25%. La buena noticia es que se pueden actualizar.
Es el primer Presupuesto en el que aumenta la inversión pública. ¿Hasta qué punto han pesado en la decisión de no gastar más en inversión los compromisos adquiridos de ejercicios anteriores?
"Incrementar el gasto público solo es posible si se puede financiar. Es un errorpretender elevar el gasto con deuda pública"
Mucho. El de 2015 es el primer Presupuesto que no incluye obligaciones de pago de Gobiernos anteriores. Como mínimo, hemos gastado 7.000 millones en desde 2012 en asumir gastos de legislaturas pasadas.
¿Cuándo empezarán a llegar los recursos del Plan Crece?
Empezarán a llegar cuando los gastemos. Estamos todavía negociando el acuerdo de asociación en cuanto a la operativa de los programas. Pretendemos agilizar al máximo el proceso. Las comunidades tienen un porcentaje altísimo de fondos estructurales para ejecutar y, básicamente, el único margen para invertir procede de esos recursos.
En porcentaje sobre el PIB, el gasto público se encuentra muy alejado de la media europea. ¿Cree que debería acercarse al promedio?
Incrementar el gasto público solo es posible si se puede financiar. Es un error pretender elevar el gasto con deuda pública.
¿Se podría hacer incrementando los ingresos?
Eso no es lo que demanda la ciudadanía. Creemos que la fórmula más eficiente para la economía es mantener un porcentaje de presión fiscal en el 39%, que es el objetivo de 2017. Y si crecemos aumentará el PIB y tendremos mayor capacidad para financiar lo que el pacto social ha definido como el Estado de bienestar. Hay que protegerlo, pero hay que hacerlo para hoy y dentro de 20 años. No se puede empezar a tirar del gasto social con medidas populistas que nos llevan a sacrificar la sostenibilidad del futuro.
¿A quién se refiere cuando habla de medidas populistas?
Todos los tenemos en la cabeza.
Cumplir el objetivo de déficit por segundo años consecutivo
Un contundente “sí”. Es la respuesta que da Marta Fernández Currás cuando se le pregunta si España cumplirá el objetivo de déficit este año. El conjunto de la Administración cerró el año anterior con un desfase del 6,3% del PIB y debe reducirlo hasta el 5,5%. Ello equivale a un ajuste superior a los 6.000 millones. Si Fernández Currás acierta en su diagnóstico, España habrá cumplido por segundo año consecutivo el objetivo de déficit.
A favor del sector público han jugado las nuevas normas de contabilidad de la Unión Europea que han incrementado el volumen del PIBy, por lo tanto, reducido el ratio del déficit público. En cualquier caso, la secretaria de Estado de Presupuestos señala que el Gobierno logrará un ahorro en torno a los 5.000 millones por el menor gasto en intereses y desempleo. Ello, justifica, se explica porque el Ejecutivo es conservador a la hora de presupuestar los gastos. De hecho, Currás confía en destinar también el próximo ejercicio menos dinero del previsto al pago de los intereses de la deuda, una partida que inicialmente asciende a 35.519 millones de euros.
Una de las consecuencias del elevado déficit público registrado en los últimos ocho años es el incremento de la deuda pública que, según las previsiones del propio Gobierno, superará el 100% del PIB el próximo año. La secretaria de Estado de Presupuestos advierte de que parte del aumento del nivel de pasivo se explica por la puesta en marcha de medidas extraordinarias, como el plan de pago a proveedores o la reestructuración del sistema bancario.
Según las cuentas del Ejecutivo, será a partir de 2016 cuando el Gobierno alcanzará superávits primarios, es decir, los ingresos públicos superarán los gastos si se descuentan los intereses. Ello, unido al crecimiento del PIBnominal, permitirá iniciar una reducción del nivel de deuda pública. La Ley de Estabilidad Presupuestaria recoge que el nivel de pasivo debe alcanzar en 2020 el 60% del PIB. A diferencia del déficit, este objetivo no parece alcanzable.