El Ibex se frena sobre los 10.700 puntos sin Wall Street y a la espera de Draghi
Frenazo bursátil en el comienzo de una semana marcada por la reunión mensual del Banco Central Europeo (BCE). Los inversores optan por la cautela a la espera de saber si el organismo presidido por Mario Draghi adopta alguna nueva medida para impulsar el crecimiento de la región. Hoy, unos débiles datos de actividad del sector manufacturero en la zona euro y la falta de referencias desde Estados Unidos, con Wall Street cerrado por el día del trabajo en aquel país, han hecho que las Bolsas europeas apenas se muevan del lugar donde terminaron la pasada semana. Pocos cambios en el comienzo de septiembre. En línea con el resto de índices del Viejo Continente, el Ibex sube un exiguo 0,17% hasta los 10.746,5 puntos.
La principal referencia macroeconómica del día han sido los datos PMI de actividad del sector manufacturero de agosto en la zona euro, que cayó a mínimos de trece meses. La cifra indica que la economía de la región se sigue frenando, pues el PMI cayó hasta los 50,7 puntos, una décima peor de lo esperado por el mercado y por debajo de los 51,8 puntos de julio. En cuanto al desglose por países de la zona euro, el indicador cayó hasta su nivel más bajo en cuatro meses en España (52,8) y a mínimos de once meses en Alemania (51,4). Los 50 puntos marcan en este dato la barrera entre una economía en expansión y otra en contracción. Por debajo de este umbral queda el PMI manufacturero de agosto en Italia (49,8) y el de Francia, que cae hasta los 46,9 puntos, mínimo en once meses.
Datos que confirman la debilidad de la recuperación en Europa, uno de los motivos que podría llevar al BCE a actuar en su reunión de este jueves. Con todo, la mayoría de los expertos no espera movimientos por parte del organismo central. Desde Schroders explican en un informe reciente que, a pesar del discurso de Draghi en Jackson Hole, “nos cuesta ver al BCE aprobando medidas más agresivas como un programa de compra de deuda pública, cuando este mes se pondrán en marcha las barras de liquidez para la banca ligadas a la concesión de créditos y se sigue trabajando en instrumentar un programa de compra de titulizaciones”. Por eso, añaden, “los mercados podrían llevarse una decepción en la reunión de septiembre”. A la espera de esa cita, hoy, la planicie con la que ha cerrado el Ibex se asemeja a la del resto de índices europeos. El Dax alemán ha cedido un 0,08%; el Cac francés, un 0,23% y el FTSE MIB italiano, un 0,55%.
Antes de conocer las cifras de la zona euro, los inversores recibieron el indicador PMI manufacturero de agosto en China, que quedó también ligeramente por debajo de las expectativas del mercado al caer hasta los 51,1 puntos en el dato oficial y los 50,2 puntos en el indicador elaborado por HSBC. Mañana se publicará en Estados Unidos el PMI del sector de las manufacturas.
Con la reunión del BCE en el horizonte, Ucrania sigue preocupando. La UE debatió durante la cumbre del fin de semana aprobar nuevas sanciones contra Rusia si no cambia su posición respecto al conflicto ucraniano esta semana. Hoy, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia ha afirmado que, en caso de que la UE apruebe más sanciones, el país “se reserva el derecho de adoptar medidas de respuesta para defender a sus legítimos intereses”. La posibilidad de que la guerra comercial entre Rusia y la UE se agrave es un riesgo que amenaza a los mercados.
Otra de las grandes referencias de la semana será la publicación el viernes del dato de empleo de Estados Unidos el pasado mes. Una cifra clave porque la Reserva Federal ha unido la posible subida de tipos de interés y la retirada de estímulos a la evolución del mercado laboral. Hoy, el cierre de la sesión en Wall Street a causa del Labor Day (día del trabajo) en Estados Unidos ha dejado huérfanos de referencias a las Bolsas europeas por la tarde.
En el mercado secundario de deuda, mientras, el interés del bono español a diez años sube ligeramente hasta el 2,25% el día en el que el Tesoro ha celebrado su primera subasta de deuda a 50 años. Mientras, el bono alemán a diez años, ha caído hasta el 0,88%, por lo que la prima de riesgo sigue estable en el nivel de los 137 puntos básicos.
El euro, por su parte, continúa en el entorno de los 1,31 dólares, lo que supone su nivel más bajo en cerca de un año. La divergencia entre la política monetaria y la situación económica en ambos lados del Atlántico justifica la depreciación del euro frente a la divisa estadounidense en las últimas semanas, aunque los expertos creen que en las próximas sesiones la moneda única podría rebotar levemente.