Altadis busca concienciar contra el creciente contrabando de tabaco
La tabacalera estima que el Estado deja de recaudar 1.100 millones de euros en impuestos El 57% de la venta ilícita se produce en Andalucía por su cercanía a Gibraltar
"Dale a la máquina, por favor”, dice un cliente desde el fondo de la barra del bar. El camarero, sin prisa, pulsa el botón del mando que permite usar la expendedora de tabaco. La compra de este cliente sigue los cauces legales, pero no todos los fumadores lo hacen. El comercio ilícito en este sector se ha disparado en los últimos años.
En 2008, antes de la crisis, apenas el 4,7% de los cigarrillos que se consumían en España no habían seguido los cauces que dictaba la ley. En 2013, ya sumaban un 11,3% del total, según un estudio de Ipsos Marketing para las principales tabacaleras.
Estas cifras motivaron a la española Altadis a trabajar por la concienciación entre la opinión pública de los riesgos que traía este comercio ilegal. Para ello, se organizaron durante los últimos dos meses una serie de conferencias sobre el contrabando en las ciudades andaluzas de Sevilla, Málaga, Cádiz, Huelva y Granada. Precisamente, un 57% del total del mercado ilegal en España se produce allí.
“Es preciso concienciar sobre este grave problema”, afirma Juan Arrizabalaga, consejero delegado de Altadis. Defiende que hay un gran desconocimiento entre los consumidores. Así se desprende de un estudio realizado por Análisis y Servicios de Marketing (ASM) para la empresa. Solo un tercio del total de los fumadores sabe que los únicos lugares para la compra son los estancos o las máquinas autorizadas
Altadis pide a los sectores público y privado que se unan para luchar contra este problema. En las conferencias participaron representantes de los estanqueros, de la Agencia Tributaria, autoridades locales y miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
Desde el comienzo de la crisis la tabacalera española lanza campañas de concienciación entre las que se enmarcan estas conferencias. La mala situación económica, unida a la pérdida de nivel adquisitivo, ha provocado el aumento del contrabando.
Durante la conferencia, se transmitió el mensaje de que el golpe del contrabando a la sociedad es doble. En primer lugar, va contra el sector. Provoca pérdidas para la industria, cierre de establecimientos y, por tanto, aumento del desempleo.
El segundo golpe que se recibe, según defiende Altadis, es el fiscal. La tabacalera calcula que las arcas públicas dejaron de recibir 1.100 millones de euros.
El evento sirvió para alertar que este negocio ilícito provoca la proliferación de mafias. Además, se saltan controles de sanidad o permiten el acceso de los menores al producto, advirtieron.
Altadis señala a tres territorios como los causantes del aumento del contrabando: Gibraltar, Andorra y Canarias. Las diferencias fiscales entre estos lugares y la península hacen que el precio de la cajetilla sea sensiblemente menor. Precisamente la cercanía con la colonia inglesa es lo que hace que la región andaluza sea la más castigada. Consideran que la falta de impuestos en estos lugares y la creación de marcas muy baratas, conocidas como ilicit whites, hacen que se conviertan en plataformas para el contrabando.
Arrizabalaga considera recomendable que las autoridades fiscales vecinas “se animen a introducir un impuesto mínimo que evite estos mercados de marcas muy baratas”. El consejero delegado de Altadis cree que “esto reduciría el contrabando al verse incrementado su precio”.
Por delante quedará ver si estos lugares aceptan introducir estos cambios.
Los estanqueros, el sector más perjudicado
En las jornadas organizadas por Altadis en Andalucía participó uno de los grupos más afectados por el contrabando, el de los estanqueros. Mario Espejo, el presidente de la Unión de Asociaciones de Estanqueros de España, coincide con la compañía tabacalera al remarcar que existe poca concienciación. “Es un problema muy grave y los consumidores no se dan cuenta de las implicaciones fiscales y sanitarias que tiene”, asevera con indignación.
El representante de los estanqueros cree que la subida del precio de las cajetillas en España no ha provocado que baje el consumo de tabaco, sino que crezca el mercado ilegal.
Espejo avisa, además, que, aunque las zonas más afectadas son las provincias andaluzas, “comienza a haber contrabando en lugares donde antes no lo había”, en referencia a regiones como Zamora o Salamanca, en las que antes estos productos ilegales eran casi residuales.
Su análisis coincide con el llevado a cabo por Altadis: los bajos impuestos de las autoridades vecinas provocan el aumento del contrabando. “Es una presión fiscal ridícula”, afirma con dureza.
“Se vende tabaco por las calles”, lamenta. “Es muy difícil perseguir este tipo de delitos”, admite con un tono de resignación en la voz.