¿El nuevo recibo de la luz acaba con la tarifa nocturna?
Dentro de pocos días, muchos clientes, que no todos, recibirán las primeras facturas de electricidad desde el cambio de criterio de fijación de precios decretado en el mes de abril. Los que no tengan contador digital verán si la media diaria significa un descenso de precios y los que ya lo tienen si la discriminación por horas permite un uso más “inteligente” de la luz y eso se nota en el bolsillo. Esta discriminación, a posteriori, ya que sabemos el precio del tramo horario ya transcurrido este, está generando muchas dudas, una de las más importantes es que va a pasar con los usuarios de la conocida “tarifa nocturna” que ya facturaban con dos o tres precios diarios diferenciando la hora de uso de la electricidad.
La “tarifa nocturna” que desde el 2008 se denomina “tarifa con discriminación horaria” se caracteriza por diferenciar el consumo diurno del nocturno y ofrecer un precio más rebajado del kilovatio hora (kWh) durante la noche. La razón principal de elegir esta tarifa es el uso de acumuladores para agua caliente y calefacción que se recargan en el horario de tarifa más barata para su uso en los horarios de precio superior. De hecho sólo es rentable si el consumo en estas horas es superior a un tercio del total, si no fuera así, estaríamos perdiendo dinero.
Esta modalidad tiene dos posibilidades, la más usada, que diferencia 2 periodos, la franja valle que corresponde a las horas de noche y la franja punta donde se engloba las horas del día con tarifas más caras. La segunda posibilidad añade una nueva franja, la supervalle que coincide con la madrugada y es la más barata de las tres.
Cuenta atrás para el final de la tarifa nocturna
Este tipo de tarifas choca con el nuevo modelo de facturación en la que no habrá 2 o 3 precios por Kw/hora sino que habrá 24, tantos como horas tiene el día. Este nuevo precio ya no distinguirá si consumes a las 3 de la mañana con las 3 de la tarde, sino que incluso en las horas de electricidad más barata habrá diferencia de precios, estableciendo una discriminación horaria total. Pero para llegar a este punto antes tienen que tener todos los consumidores el contador digital, y no existe obligación hasta el 2017.
Por ello, en un primer momento, cuando no se lea el consumo concreto de cada cliente sino que se aplique un perfil medio, seguirán existiendo dos precios, la media del coste de la energía en las horas punta y la media del coste de la energía en las horas valle. Es decir, quien no tenga contador digital se le aplicará cada día una media diaria, y quien tenga la “tarifa nocturna” tendrá dos medias por cada tramo. Pero esta medida es coyuntural, ya que cuando cada cliente se le cobre lo que él ha consumido realmente cada hora, en principio no habrá diferencia entre un cliente con tarifa nocturna y un cliente sin ella en el precio variable pero si en el total de la factura, que habrá una pequeña diferencia a la tarifa nocturna.
Esto es así, ya que en ambos casos hay que sumar los peajes, que es la tarifa que se paga a la distribuidora por el mantenimiento de la red. En el caso de no tener discriminación horaria el precio es el mismo todo el día pero con discriminación horaria es más alto las horas punta y más bajo las horas valle, de modo que sí tendrá sentido la tarifa nocturna, no por el coste de la energía pero sí por el coste de los peaje y siempre que sigamos gastando más del tercio de nuestra electricidad en las horas valle.
Esperando las futuras tarifas planas
Pero aún queda algo de esperanza a los que quieran discriminar su tarifa eléctrica en dos tramos horarios y está en las futuras tarifas planas. Anunciadas por el ministro José Manuel Soria, son muchas las compañías eléctricas que ven con muy buenos ojos cerrar con los clientes que lo deseen un precio fijo por kilowatio que se aplique por periodos renovables de un año.
Si finalmente se establecen este tipo de tarifa es probable que continúa existiendo una tarifa nocturna, distinta, ya que los precios se fijarían con antelación y se mantendrían durante un año sin cambios, pero beneficiosa para los cientos de miles de usuarios que han invertido en un sistema de consumo eléctrico en sus casas que de golpe puede hacerles perder mucho dinero.