La banca canalizará pensiones privadas hacia los planes Ahorro 5
"Los planes Ahorro 5 van a tener un éxito comercial rotundo”. Así de seguro se muestra uno de los directivos españoles más veteranos en el ámbito de los planes de pensiones y el ahorro previsión, cuando se refiere al nuevo producto financiero creado por el Gobierno con la reforma fiscal.
Estos planes, que podrán articularse tanto a través de un seguro de vida como a través de una cuenta bancaria, incorporán un importante atractivo fiscal: si el cliente los mantiene durante cinco años, los rendimientos que genere no tributarán. Con este premio fiscal, y la obligación de que la entidad que lo comercialice garantice la devolución de al menos el 85% del capital, los planes de Ahorro 5 se convertirán “en un duro competidor tanto para los depósitos, como para los productos diseñados para completar la pensión de jubilación, como los planes de pensiones o los PIAS [planes individuales de ahorro sistemático]”, explica este directivo bancario. Serán sin duda un valioso revulsivo para reanimar la oferta comercial de la banca en un momento de tipos de interés en mínimos y con el que captar un ahorro con un horizonte de cinco años.
Las cuentas del sector
Desde el servicio de estudios de uno los bancos más grandes del país se muestran convencidos de que los nuevos planes se convertirán en un importante complemento para las pensiones privadas, que han visto recortarse sus ventajas fiscales con la reforma promovida por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.
Hasta ahora, los mayores de 50 años podían desgravarse de su base imponible del IRPF hasta 12.500 euros por las aportaciones que realizaran a sus pensiones privadas. A partir de 2015, el tope de desgravación será de 8.000 euros, con lo que aquellos que alcanzaran el tope deberán pensar a dónde redirigir sus ahorros.
De acuerdo con datos facilitados por la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGSFP), correspondientes a 2012, 82.000 personas realizaban aportaciones a planes de pensiones cercanas a los topes máximos de desgravación vigentes hasta ahora (10.000 euros para menores de 50 años y 12.500 para el resto). “Los planes Ahorro 5 pueden ser un producto idóneo para aquellos trabajadores que han visto reducirse el tope de desgravación”, explican desde esta entidad.
De acuerdo con las primeras estimaciones del sector, los planes Ahorro 5 ofrecerán una rentabilidad de entre el 2% y el 3% TAE, algo superior a la que ofrecen los depósitos bancarios. Está por ver si los bancos y aseguradoras que los comercialicen pueden aplicar algún tipo de bonificación comercial, o extratipos, saltándose así la barrera establecida por el Banco de España para los depósitos de alta rentabilidad.
“Para aquel cliente conservador, que quiere ahorrar a medio o largo plazo, y al que le eche para atrás la indisponibilidad de los planes de pensiones, que solo pueden rescatarse a la jubilación o en situaciones especiales, como el paro o una discapacidad, los planes Ahorro 5 pueden convertirse en una buena alternativa, será un producto muy atractivo”, explica Rodrigo Galán, director general de Ibercaja Vida.
Aunque el ahorro fiscal máximo que puede generar este producto a lo largo de sus cinco años de vida difícilmente superará los 150 euros, los departamentos comerciales y de diseño de producto del sector bancario consideran que será una fórmula financiera muy fácil de vender al ahorrador. “Es un producto seguro, con una buena ventaja fiscal y sin el lastre de la indisiponibilidad de las pensiones privadas. Lo tiene todo para triunfar”, explican desde otra entidad.
Además de robar parte del ahorro que tradicionalmente se destinaba a planes de pensiones, los planes Ahorro 5 también arañarán algo de cuota a seguros de ahorro previsión, como los PIAS y los PPA (planes de previsión asegurados), e incluso a las imposiciones a plazo fijo, que tendrán una rentabilidad similar, pero no tienen ninguna exención fiscal.