Deuda y Bolsa tienen más margen
El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, ha empezado a ejecutar el comentario de julio de 2012 con el que logró desbloquear las dudas sobre el proyecto europeo y la continuidad de la moneda única: “Haremos lo que haya que hacer para preservar el euro, y créanme, será suficiente”. Las medidas anunciadas el primer jueves de junio, y otras adicionales que aseguró se pondrían en marcha si persistía la atonía del crecimiento y el riesgo de deflación, han proporcionado la suficiente energía a los mercados para consolidar el estrechamiento de las primas de riesgo de los países del Sur y para comenzar a considerar valores crecientes en las compañías cotizadas europeas. Por ello, los analistas han revisado al alza sus estimaciones para las Bolsas, y estiman que el Ibex podría llegar a los 12.000 puntos este año, y vaticinan que el bono español seguirá bajando, aunque le auguran ya un recorrido de mejora muy limitado.
La bajada del bono a diez años, que el viernes cerró en el 2,6%, es la clave para la financiación de la economía, y se encuentra ya en un nivel que puede considerarse más que óptimo para estimular demanda y concesión de crédito. Y de ello depende el consiguiente crecimiento de la actividad, la mejora de las ventas y beneficios de las empresas y los precios de las cotizadas.