Más allá de la burbuja de Londres
Los inversores que piensan que la economía de Reino Unido está casi lista para unos tipos de interés más elevados no han captado el mensaje de Mark Carney. El gobernador del Banco de Inglaterra no considera que un fuerte mercado de la vivienda y la caída del desempleo hagan que el país esté preparado para un incremento de la inflación. Carney está probando las posibilidades, pero por ahora probablemente hace lo correcto al intentar retrasar un alza de tipos.
Carney dio su último pronóstico en la conferencia de prensa del miércoles sobre el informe trimestral de inflación del banco central. Lidió las sugerencias de que la política monetaria es la herramienta adecuada para hacer frente a lo que se parece cada vez más una burbuja de precios de la vivienda, especialmente en Londres. Eso, dijo, es materia para la reunión de junio del Comité de Política Financiera. Tampoco estaba muy impresionado por la caída de la tasa de desempleo al 6,8%.
Para el Comité de Política Monetaria, la economía está lejos de ser robusta. El PIB sigue siendo inferior al máximo previo a la crisis. El autoempleo, en gran parte no deseado, representa más de la mitad de los nuevos puestos de trabajo del último año. La tasa de crecimiento anual del sueldo regular es de solo un 1,3% –por debajo de la inflación del 1,6%–. Además, la combinación del aumento del PIB y el descenso de las exportaciones sugiere que un tipo de economía desequilibrada que podría tambalearse fácilmente, especialmente si los tipos suben.
Para el Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra, la economía está lejos de ser robusta
Sin embargo, la estrategia del Banco de Inglaterra es arriesgada. En particular, el Comité de Política Financiera podría no ser capaz de poner freno a los precios de las casas. Pero por ahora, parece correcto estar más preocupados por la economía plana que por la posible burbuja en Londres. Si el banco central no está totalmente equivocado acerca de la debilidad económica, los tipos de interés de Reino Unido podrían permanecer donde están más tiempo del que los inversores esperan.