Popular prevé ganar más de 300 millones este año
El consejero delegado de Banco Popular, Francisco Gómez, ha adelantado esta mañana en la presentación de resultados de la entidad que la previsión de beneficios que manejan para este ejercicio está “ligeramente por encima” de los 300 millones de euros.
La aspiración contrasta con los resultados del primer trimestre del año, en los que Popular ha ganado 63 millones, casi un 40% menos que en el mismo periodo del año anterior.
Desde la firma achacan esta evolución fundamentalmente al menor rendimiento de la cartera de renta fija. La compra de deuda pública con el dinero barato que presta el Banco Central Europeo, una rentable operación conocida como carry trade, ha sido criticada por el mismísimo presidente de supervisor europeo, Mario Draghi.
Este tipo de operativa es la que ha venido reduciendo Popular con respecto al año pasado de cara también a unos test de estrés que penalizan en parte la tenencia de deuda pública.
Gómez, sin embargo, espera que el aún débil negocio bancario siga mejorando a lo largo del año gracias a la evolución de la situación macroeconómica, que está resultando “mejor” de lo previsto ha reseñado.
Prueba de ello, ha argumentado, es que Popular reduce la mora por primera vez desde el inicio de la crisis y que las carteras que entran en impagos están evolucionando a la baja desde comienzos de año.
En cuanto a los test de estrés, Gómez ha asegurado que, pese a la "severidad" de las pruebas", cuyos criterios se hicieron públicos ayer, la entidad está perfectamente preparada para superarlas, así como en líneas generales lo está el sector financiero español.
Por otra parte, Popular celebra la reducción del coste del pasivo y espera que el vencimiento de unos 50.000 millones en depósitos les permita extender esta mejora a las cantidades que se vayan renovando.
Del lado del crédito, aunque el saldo aún es negativo en términos interanuales, Gómez avanzó que en el año actual ya está creciendo la concesión, un 7% entre pymes concretamente.
Una estrategia que les ha permitido ganar unos 19.000 nuevos clientes en el segmento de pequeñas y medianas empresas y con la que esperan duplicar la captación durante el segundo trimestre.
En cuanto a la guerra comercial abierta entre las entidades para hacerse con las pymes, Gómez ha reivindicado que esta ha sido siempre la seña de identidad de Popular y ha celebrado que la competencia siga sus pasos porque demuestra que es un camino de éxito.
“Esto no se improvisa, ni se logra en uno o dos años”, ha advertido, sin embargo, el consejero delegado de Popular sobre los planes puestos en marcha por otras entidades para captar pymes.
Por otra parte, la entidad que preside Ángel Ron celebra que ha multiplicado por más de tres veces la venta de inmuebles durante el trimestre, lo que achacan al plan que pusieron en marcha el año pasado más que a la reciente venta de su plataforma Aliseda a fondos de inversión.
El traspaso de Aliseda al consorcio formado por Kennedy Wilson y Värde Partners, sin embargo, permitirá multiplicar las ventas desde la situación actual en los próximos meses, ha garantizado Gómez.
Una entidad con apetito con más interés por Catalunya Banc que por Barclays
Banco Popular ha arrancado el año con ímpetu y apetito. La entidad que preside Ángel Ron, ultima la compra del negocio minorista de Citi y su área de tarjetas de crédito (45 oficinas, en torno a un millar de empleados y 1,3 millones de tarjetas).
La operación, según fuentes del mercado, es solo la primera parte de un plan para terminar vendiendo el paquete conjunto de sus propias tarjetas más las de Citi a un tercer interesado, entre los que destacan varios fondos de inversión.
Con todo, Popular no descarta nuevas operaciones a lo largo del año. La retirada del mercado minorista español por parte de Barclays abre una puerta también a posibles compras en este campo, si bien el consejero delegado de Popular, Francisco Gómez, ha reseñado que “Barclays, no parece que sea de nuestro interés”.
Gómez, sin embargo, ha aseverado sobre la subasta de Catalunya Banc que “si llega a producirse, la estudiaremos” y que si resulta beneficiosa y permite mejorar el negocio de Popular “la ejecutaremos”.
“Nos sentimos cómodos con la capacidad que tenemos en España”, valoró, no obstante, Gómez, quien argumentó que la entidad no tiene ningún objetivo concreto de crecimiento inorgánico para este año.