Los trabajadores sabrán cuándo pueden jubilarse y cuánto cobrarán de pensión
Burgos rechaza una fuerte subida del IVA para compensar una eventual rebaja de cotizaciones La cifra de aplazamientos de pago solicitados por las empresas cae un 15% en el trimestre y su cuantía, el 36%
El secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, ha avanzado hoy durante su participación en el Foro CincoDías, patrocinado por Banco Sabadell y Accenture, que el Ministerio de Empleo ya ha remitido esta misma mañana a los agentes sociales el proyecto de Real Decreto por el que el Gobierno pretende reforzar la información que recibe el trabajador acerca de su carrera de cotización.
El objetivo de esta iniciativa, según explicó Burgos, es que todos los trabajadores dispongan de toda la información referida a la cotización que realiza por ellos su empresa, así como de las expectativas futuras de jubilación que tienen según dichas cuotas. “Hasta ahora no podíamos ver nítidamente las aportaciones realizadas y, por ello, las cosas tienen que cambiar”, aseguró el secretario de Estado. Así, el departamento de Empleo ultima el plan por el que a lo largo del último trimestre de este año comenzará a enviar a los trabajadores mayores de 50 años una carta con los datos relativos a su situación laboral y sus expectativas de retiro.
De este modo, la misiva pretende incluir la fecha posible de jubilación del trabajador (siempre teniendo en cuenta cuándo le correspondería según la edad legal que fije el sistema en ese momento) y cuánto cobrará de pensión, entre otros conceptos. El objetivo es reforzar la transparencia y hacer que el trabajador confirme que su prestación “es justa”.
Contrario a la devaluación fiscal
Tomás Burgos, se ha mostrado también hoy firmemente contrario a la propuesta de los expertos de acometer en un futuro una devaluación fiscal, que consistiría en acometer una rebaja generalizada de cotizaciones sociales y, a cambio, subir el IVA para compensar la pérdida de ingresos.
En su opinión, esta propuesta es aceptable teóricamente pero, según sus cálculos, sería inviable en la práctica. "Es posible reducir cuotas si esto se comensara con las mismas cuantías para pagar los 8.000 millones de euros, que cuesta la nómina de las pensiones, mes a mes durante catorce meses", dijo Burgos.
Según las cifras que baraja el Secretario de Estado, para reducir el desempleo un punto habría que rebajar las cotizaciones sociales entre cinco y seis puntos (cada punto suponen 3.000 millones de ingresos para el sistema) y esto exigiría subir ocho o nueve puntos el IVA, explicó. "Y nadie está pensando en subir el IVA al 29%", añadió Burgos.
Además, precisó que el pago de las pensiones es recurrente todos los meses y, por el contrario, la recaudación del IVA "no es lineal". Por ello, concluyó este tema asegurando que "el debate hay que hacerlo en su conjunto y no solo hablar de si se rebajan o no las cotizaciones sino del nivel de protección que se quiere mantener".
Dicho esto se refirió también a otro aspecto de la próxima reforma fiscal al indicar que "el sistema público de pensiones no rivaliza con los privados". Por esta razón consideró que si la próxima reforma fiscal introduce incentivos a los planes privados estos "serán bienvenidos". Aunque precisó que "si tuvieramos que elegir nosostros" esos incentivos se centrarían en los planes colectivos de empleo, que se negocian en el seno de las empresas con los representantes de los trabajadores.
Situación actual del sistema
El número dos del Ministerio de Empleo ha hecho también hoy un repaso a la situación general del sistema de pensiones. Según dijo "existen datos objetivos y contrastables que idican que la Seguridad Social está mas fuertes y paga más pensiones que nunca". En marzo se alzcanzó un nuevo récord con el abono de 9,17 millones de pensiones cada mes.
Así destacó que el saneamieno del sistema es fruto tanto de las últimas reformas que retrasaron la edad de jubilación, aumentaron el número de años que se toman en cuenta para calcular la cuantía de la pensión y endurecieron el acceso a la jubilación anticipada y parcial. Este último cambio ha situado la edad real de jubilación en 64,3 años, precisó.
Igualmente, el responsable de la Seguridad Social recordó otras actuaciones de su departamento para aumentar los ingresos del sistema, como las mejoras de gestión que, a pesar de reducir sus costes de funcionamiento un 3,3%, han logrado recuperar en vía ejecutiva el pasado año 1.855 millones de euros, un 15,7% más que el año anterior. Además destacó que la tasa de morosidad ha bajado al 2,33%, "la más baja desde el inicio de la crisis".
Y avanzó también que la mejora del empleo está propiciando un aumento de la recaudación, "que lleva cuatro meses en tasas positivas", con un crecimiento interanual del 4,80% actualmente. Asimismo la incipiente recuperación económica está provocando un descenso de los aplazamientos de pago por parte de las empresas, cuyo número ha descendido un 14,8% en el primer trimestre del año y su cuantía ha bajado más del doble, un 35,6%.
Pero a pesar de todas estas mejoras, Burgos advirtió que la Seguridad Social "sigue atravesando un momento delicado". De hecho, "solo hay que ver que en los últimos diez años hay un millón de niños menos y 1,5 millones de jubilados más"; y que durante la crisis la pensión media ha subido el 28% mientras que la inflación acumula un aumento del 9,6% en los últimos cinco años.
Por ello abogó por "seguir haciendo las reformas que hagan falta en el momento en el que hagan falta" pero siempre sin volver a recurrir a la emisión de deuda para pagar las pensiones. Además añadió que en esta futura hoja de ruta "el equilibrio presupuestario es imprescindible" y por ello los responsables del sistema intentarán que el déficit previsto para 2014, quede por debajo del 1,1% estimado, al igual que en 2013 los números rojos de la Seguridad Social fueron tres décimas inferiores a los calculados inicialmente.