El PIB se encamina a superar el 1%
Los analistas detectan mejoras en la demanda nacional, en la generación de empleo y en el crédito nuevo Solo el déficit parece seguir sembrando dudas acerca de su cumplimiento
El Servicio de Estudios del BBVA puso de manifiesto hoy lo que en privado comentan cada vez más expertos y el propio Gobierno. Por primera vez desde la crisis, todos los sesgos que existen sobre España son al alza. Es decir, que todo apunta a que la mejora de la actividad es firme, lo que permitirá cerrar el año con un PIB por encima del 1%.
La economía española registró a lo largo del pasado año una mejora gradual que parece consolidarse al inicio de este 2014. Así, BBVA Research explicó ayer en su informe Situación España que todos los indicadores adelantados de actividad disponibles hasta el momento apuntan que el primer trimestre de este ejercicio se cerrará con un avance del 0,4% sobre los tres últimos meses de 2013, una décima más que el dato con el que se cerró el ejercicio pasado.
Y aunque aseguró que, por ahora, no prevé modificar su previsión de que este año el PIB avance un 0,9% (dos décimas que la cifra oficial del Ejecutivo), si las principales variables evolucionan como está previsto, “en primavera revisaremos ese dato bastante por encima del 1%”, coincidieron el economista jefe de BBVA Research, Jorge Sicilia y el responsable de Economías Desarrolladas, Rafael Doménech.
De hecho, si se confirma finalmente que el PIB está creciendo en estos primeros tres meses del año a una tasa trimestral del 0,4%, como pronostica BBVA, y se aplica la metodología estadounidense, el crecimiento anualizado sería ya del 1,6%. En esta línea, los indicadores sintéticos de actividad que maneja el Ministerio de Economía también evolucionan a un ritmo mucho más favorable que los registros obtenidos a mediados de 2013.
Pero es que no es solo el BBVA quien apuesta por una clara mejoría económica a lo largo de este año. Dentro del panel de 19 expertos con el que elabora Funcas sus previsiones, hay seis instituciones que ya apuestan por avances del PIB por encima del 1%; lo que adelanta que en la próxima revisión de estas cifras, el consenso se modificará al alza.
Fuentes gubernamentales trabajan ya en privado en la próxima revisión del cuadro macro, tal y como apuntó esta mañana el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos. Durante su participación en los Desayunos Informativos de Europa Press, el ministro afirmó que en el programa de estabilidad que España remitirá a Bruselas en abril es “probable” que se incluya una mejora de las previsiones económicas, dado que las estimaciones actuales están en “la banda baja del consenso”. De hecho, el ministro ya había indicado días atrás que la previsión de crecimiento del PIB estará en el entorno del 1%, frente a la estimación actual del 0,7%.
Mayor certidumbre
De Guindos admitió que la recuperación es aún incipiente y que todavía no se ha traducido en una mejora real de la economía de los ciudadanos. “Los retos que tenemos por delante pasan por consolidar esta recuperación incipiente y hacerlo de tal modo que consigamos volver a los niveles de renta y empleo anteriores a la crisis que nunca debimos perder”, concluyó.
¿Qué está pasando para que tantos analistas y servicios de estudios comiencen a considerar la posibilidad de elevar sus primeras estimaciones sobre la actividad durante este año?
En primer lugar, apuestan por que la mejoría que se espera en el crecimiento de la economía global favorezca aún más la evolución de las exportaciones españolas, dadas las ganancias de competitividad y el proceso de diversificación de destinos en el están inmersas las empresas españolas.
Además, según el estudio de BBVA, el entorno actual es de mayor certidumbre, ha cambiado por completo la percepción que existe de España y eso está permitiendo que la demanda interna recupere lentamente su nivel de consumo, reduciendo de ese modo su “lastre sobre el crecimiento del PIB”.
De hecho, en cuanto al gasto privado, el informe Situación España prevé que aumente un 0,9% este año y un 1,3% en 2015, cuando la economía ya estará creciendo a tasas del 1,9%. “En los dos próximos años, la demanda doméstica dejará de actuar como lastre de la inversión productiva privada, lo que unido al buen desempeño de las exportaciones, sentará las bases para un crecimiento sostenido”, destaca. Fruto de esta recuperación de la demanda, otro de los factores que invita al optimismo es comprobar cómo se está produciendo un punto de inflexión en los flujos de nuevo crédito.
Ajuste fiscal
Según BBVA Research, el elemento clave de la financiación que precede a la recuperación de la actividad económica es la aceleración de las nuevas operaciones de crédito, no la variación de los saldos vivos. En los últimos meses se ha detectado una mejora sustancial concentrada en la contratación de nuevos préstamos por parte de las empresas, mientras la de las familias todavía se encuentra en proceso de ajuste, salvo en el caso del crédito al consumo.
¿Será esta mejora suficiente para generar empleo? Sin duda, se trata de la pregunta del millón a la que todos los expertos suelen dar la misma respuesta: “dependerá de si los Gobiernos de España y Europa son capaces de mantener el espíritu reformador”.
A este respecto, reclaman nuevas medidas en el ámbito laboral, fiscal y financiero, como avanzar en la unión bancaria. En cualquier caso, los analistas se muestran convencidos de que el ritmo de crecimiento esperado para la economía española (de más de ese 1%) será suficiente para crear empleo de manera sostenida, si bien no permitirá reducir la tasa de paro de forma significativa, que se situará en el 25,6% a finales de este año y en el 24,8% en 2015.
En el lado más negativo se sitúa el déficit. BBVA subrayó ayer que el esfuerzo fiscal continúa, aunque lo hace a un ritmo insuficiente. Tanto es así que su previsión de cierre de 2013 es del 7% frente al 6,5% comprometido con Bruselas. Por su parte, el ministro Guindos insistió en que el déficit en España se encuentra “bajo control”, si bien puede haberse registrado alguna desviación en varias comunidades autónomas. En definitiva, todos los sesgos que existen en la actualidad sobre la economía española son al alza y eso no había ocurrido desde el inicio de la crisis.