El Gobierno insiste en la moderación de los salarios
El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, se ha mostrado partidario de que los agentes sociales firmen un nuevo acuerdo de moderación salarial cuando finalice el que actualmente está vigente, que acaba en 2014.
“El Gobierno siempre es favorable. Creemos que ha tenido una incidencia positiva, pero es una decisión suya. Lo único que podemos hacer es poner el marco para que efectivamente ese acuerdo se produzca”, ha señalado el ministro a los medios después de participar en los Desayunos Informativos de Europa Press.
Según Guindos, la creación neta de empleo que se conseguirá en el primer semestre será consecuencia de múltiples elementos, entre los que se encuentran la recuperación de la confianza, la mejora del entorno financiero, la moderación salarial y el incremento de la productividad.
“Esos son los elementos fundamentales que están llevando ya a que haya creación de empleo”, ha dicho, tras admitir sin embargo, que el paro sigue siendo la mayor lacra de la economía española, por lo que reducirlo debe ser un objetivo global. “Todas las actuaciones del Gobierno, del conjunto de las administraciones públicas y de los agentes económicos tienen que ir dirigidas a crear empleo”, ha añadido.
Durante su intervención en los Desayunos Informativos de Europa Press, el titular de la cartera de Economía también se ha referido a la moderación salarial como una de las “bases” de la recuperación. A su parecer, esta moderación es consecuencia de una devaluación interna que permitirá un ajuste “más duradero” en el tiempo y sin las tensiones inflacionistas que habría generado la devaluación de la moneda.
Por otro lado, Guindos ha resaltado que el cambio se está produciendo ya en el mercado laboral, con datos que apuntan a la estabilización en la pérdida de puestos de trabajo. De hecho, ha recordado que, en términos desestacionalizados, ya se observa cierta creación de empleo.
Según Guindos, este cambio se debe, en parte, a la reforma laboral que ha dado lugar a un mercado “más flexible”, que ha permitido volver a la situación de hace años, cuando España se incorporó al euro. Aún así, el ministro ha asegurado que los efectos de la reforma laboral se verán “con toda intensidad” en los próximos meses.
Preguntado por si será necesario dar una nueva vuelta a esta reforma, ha dicho que el mercado está en una constante revisión y que todos los cambios se perfeccionan, aunque el “núcleo” de esta reforma ya se ha hecho y ha funcionado bien.
“Sin la reforma, la destrucción de empleo habría sido superior”, ha dicho, tras considerar, sin embargo, que hay cierto margen para fomentar la contratación impulsando el contrato a tiempo parcial, que en España se usa menos que en otros países europeos.
Nueva publicación del INE
Finalmente, el ministro ha recordado que el Instituto Nacional de Estadística (INE) publicará en abril un análisis de los flujos del mercado laboral junto a la Encuesta de Población Activa (EPA), del primer trimestre, lo que permitirá conocer “en detalle” los flujos de entrada y salida de la población activa, del empleo y del desempleo.
Este trabajo del INE, que se publicará el 29 de abril (el mismo día que la EPA) permitirá al Gobierno tener un análisis más preciso de la situación del mercado laboral y será útil para trabajar en el futuro.
Déficit autonómico
Guindos también ha admitido que algunas comunidades autónomas pueden desviarse de su objetivo de déficit para el año 2013, aunque el objetivo final de déficit público (6,5%) se cumplirá.El ministro ha precisado que estas desviaciones no serán “significativas” y se compensarán con el superávit de las entidades locales.
De la misma forma, se ha mostrado convencido de que la Seguridad Social también cumplirá su objetivo fijado y ha asegurado que la recaudación estatal en diciembre ha ido “bastante bien”. “El déficit público de 2013 está bajo control”, ha dicho.
Además, ha recordado que la buena evolución del Tesoro y de la prima de riesgo a lo largo del año pasado ha permitido un ahorro de casi 9.000 millones en la partida para financiar los intereses de la deuda, lo que ayudará a cumplir las cifras de déficit.
