Gallego ofrece rutas y aviones a los sindicatos de Iberia a partir de 2014
El consejero delegado de la aerolínea pide acuerdos laborales antes de fin de año La dirección ultima el plan estratégico 2014-2018
Acercamiento entre la dirección de Iberia y los sindicatos. El consejero delegado de la aerolínea, Luis Gallego, está manteniendo reuniones con los distintos colectivos de trabajadores con el objetivo de recuperar la confianza y aunar esfuerzos en busca de la viabilidad de la compañía. Ofrece crecimiento a partir de 2014 con la incorporación de rutas y la compra de aviones, e incluso aligerar más la dirección.
El jueves fue el turno de UGT, CC OO, CTA y Sitcpla en representación de los tripulantes de cabina de pasajeros (TCP). “Vengo a reflotar Iberia, yo no sé cerrar empresas, pero, para ello, es imprescindible llegar a acuerdos laborales con todos los colectivos de Iberia no más tarde de fin de año”.
Gallego estuvo acompañado por el director corporativo, Sergio Turrión, el director de Recursos Humanos, José Luis Romero, y la gerente Senior de Relaciones Laborales, Margarita Sequeiro. El consejero delegado reiteró que su equipo está elaborando un plan estratégico a cinco años vista que pasa por la necesidad de un alza en la productividad que rebaje los costes laborales de Iberia a niveles de low cost.
Los directivos también aseguraron a los representantes de la plantilla que las salidas de caja de Iberia se ha producido exclusivamente para financiar su reestructuración (600 millones), la inversión en los nuevos Airbus 330 (700 millones) y una importante partida (800 millones) para soportar las pérdidas de los últimos ejercicios.
El tira y afloja con los TCP está cerca de dar frutos en un acuerdo. Las conversaciones con el colectivo de tierra están afectadas por la política que siga Iberia a la hora de intentar renovar las licencias de handling en los aeropuertos de Aena –actualmente a concurso– y con los pilotos se trata de superar el laudo dictado por Jaime Montalvo, que bloquea el crecimiento de Iberia Express.
Los sindicatos se han abierto a negociar, pero UGT ya advierte que cualquier solución debe pasar por el mantenimiento del empleo.