Catalunya Banc iguala la indemnización de Bankia y NCG para lograr pactar su ERE
El plazo de negociación expira este miércoles.
El punto de partida de Catalunya Banc en la negociación de un ERE para 2.400 de sus 7.200 empleados, la necesidad de imponer la indemnización mínima legal por despido situada en 20 días y 12 mensualidades, ha mantenido enfrentados a gestores y sindicatos durante el último mes. En un clima marcado por las protestas de la plantilla y el calendario en marcha hacia la privatización de la entidad, la oferta ha ido mejorando progresivamente en las últimas semanas para dar un paso cualitativo en las últimas horas.
De ser el ERE más duro planteado en el sector financiero, las condiciones de despido han pasado a igualar las aprobadas en las también nacionalizadas Bankia y Novagalicia, suavizando buena parte de la confrontación. Encajada esta pieza clave, entidad y sindicatos trataban de alcanzar un preacuerdo sobre el ERE este martes, en las últimas horas del mes de negociación que expira hoy, con las prejubilaciones como último gran obstáculo.
Así, si bien los gestores de Catalunya Banc terminaron flexibilizando las condiciones de despido, su negativa a aceptar acuerdos de prejubilación se ha mantenido firme. El motivo es que tratan de evitar las penalizaciones impuestas a este tipo de retiros anticipados por parte del Gobierno, que aprobó en marzo un decreto ley que obliga a las empresas a cubrir prestaciones por desempleo, cuotas a la Seguridad Social y una cuantía adicional por cada trabajador de más de 50 años que despidan, en el caso de que encadenen varios ejercicios en beneficios. Una factura que el FROB se niega a dejar en el cajón de los futuros compradores de la firma, que prevé privatizar antes de final de año.
A última hora de ayer, las partes negociaban la posibilidad de abrir una suerte de proceso de bajas incentivadas que permitan compensar la ausencia de prejubilaciones. Según informa la agencia EFE la entidad ha puesto hoy sobre la mesa de negociación la salida de 400 empleados mayores de 50 años mediante bajas incentivadas, una medida que responde en parte a las reclamaciones de los sindicatos. Sin embargo, de momento no hay acuerdo entre la empresa y los representantes de los trabajadores.
La gran baza de la oferta de los gestores fue, por tanto, llegar a una indemnización por despido de 30 días por año trabajado y tope en 22 mensualidades. Cifras que, finalmente, igualan los acuerdos sellados por Bankia y Novagalicia con sus plantillas, los referentes que los sindicatos de Catalunya Banc venían utilizando para reclamar mejores condiciones. Las otras dos entidades nacionalizadas, en concreto, iniciaron la negocición con un despido mejor pagado que el de las cajas catalanas, 21 y 23 días por año trabajado pero terminaron pactando al elevar la indemnización máxima a 30 días y un tope de 22 mensualidades.
Lo cierto es, sin embargo, que la indemnización final que reciban los trabajadores más antiguos de Catalunya Banc podría ser inferior a la percibida por los otros ya que las primas por antigüedad y voluntariedad serían más bajas.
En concreto, la fusión de cajas catalanas ha apuntado un tope de 220.000 euros por indemnización mientras que firmas como Bankia aceptaron hasta 350.000 euros.
Finalmente, la entidad busca reducir también los costes laborales de la plantilla que permanezca en la firma con una rebaja salarial que han matizado desde el 12% inicialmente planteado hasta el 10%. Aunque ambas partes se mostraban ayer optimistas sobre la posibilidad de llegar a un pacto, la reforma laboral permite a la entidad imponer un recorte unilateral en el caso de que no se llegue a un acuerdo para este miércoles.