Pescanova, un gigante valorado en 2.873 euros
La CNMV suspendió definitivamente la cotización de Pescanova el pasado 12 de marzo después de que la compañía anunciara que había detectado discrepancias en sus cuentas de 2012 y de que solicitara el preconcurso de acreedores una semana antes. Los títulos de Pescanova realizaron su último cruce en el mercado abierto a 5,91 euros, lo que otorgaba entonces a la compañía una capitalización de 169,8 millones de euros.
Cinco meses después, Pescanova no ha vuelto al mercado abierto, pero los inversores han encontrado fórmulas para vender sus participaciones en la compañía, o incluso comprarlas. Es el caso de Carolina Masaveu, quien a través de la sociedad Crisgadini adquirió 1,07 millones de títulos el 20 de agosto a un precio simbólico de 0,0001 euros por acción. Una inversión por la que abonó 107,5 euros y que otorga una capitalización virtual a Pescanova de 2.873 euros.
La operación realizada por Carolina Masaveu, una de las herederas de la saga asturiana que controla el Grupo Masaveu, no es la única que se ha realizado desde que la compañía dejara de cotizar. Desde el pasado 1 de marzo, fecha en que Pescanova fue suspendida por primera vez en Bolsa, se han realizado 14 intercambios de títulos del gigante pesquero al margen del mercado. BME los denomina como “operaciones de valor suspendido”, calificación que engloba dos fórmulas distintas.
La primera de ellas consiste en que el dueño de las acciones encuentre un comprador interesado. La segunda opción, por su parte, es que la entidad en la que el inversor tiene depositados los títulos se haga cargo de ellos. De esta forma, o bien pasarían a formar parte de la cartera de activos del intermediario, o este opta por vendérselos a otro inversor. Una circunstancia que podría haberse producido en el caso de que algún inversor se haya visto obligado a adquirir acciones para cerrar una posición bajista en Pescanova, realizada antes de la suspensión de su negociación.
Desde comienzos de marzo se ha intercambiado al margen del mercado un 3,85% del capital de Pescanova. Pero no todo al mismo precio. De los 1,1 millones de acciones de la compañía que han cambiado de manos en este tiempo, 5.248 títulos se han vendido a 5,91 euros, el último precio al que cruzaron en el Mercado Continuo las acciones de Pescanova.
Una cuantía que solo llegó a superarse el pasado 10 de abril cuando, según los registros de la Bolsa de Barcelona, se produjo una venta de 194 títulos a un precio de 7,3 euros, lo que representa una prima del 23% respecto al último precio de cotización de la compañía.
Un euro por 1.225 acciones
La transmisión de menor valor se produjo el pasado 22 de agosto, fecha en la que se vendieron 1.225 acciones por menos de un euro (0,98 euros) a un precio de 0,0008 euros por título.
Por otro lado, entre los brókeres de Bolsa más activos en la compraventa de acciones de Pescanova destaca Auriga Global Inverstors, que ha realizado cinco de las 14 operaciones especiales, aunque se trata de pequeños paquetes. Mercavalor y Renta 4, por su parte, realizaron dos operaciones cada uno.
Una puerta al consejo a precios de ganga
La adquisición de Carolina Masaveu no supondrá en un principio su entrada en el consejo de administración de la compañía, a menos que siga elevando su participación, aunque sí que tendrá un papel determinante para la construcción del nuevo órgano. En la actualidad, el consejo de Pescanova está compuesto por 11 miembros, pero la junta de accionistas de abril fijó el número en 13.
El próximo 12 de septiembre los accionistas de Pescanova deberán elegir un nuevo consejo de administración, puesto que sus actuales miembros serán revocados, y tendrán que designar un nuevo presidente, tras la dimisión de José Manuel Fernández Sousa. Según la convocatoria de la junta, todos los accionistas con una participación superior al 5% podrán presentar sus propuestas para el nuevo consejo, algo que hasta ahora solo han realizado Damm y el expresidente, Fernández Sousa, a través de la sociedad patrimonial Sodesco.
La propuesta de la cervecera catalana, que cuenta con el apoyo de Luxempart e Iberfomento, limita a siete el número de asientos, por lo que serían necesarios un total de 4,1 millones de títulos para sentarse en el consejo, en caso de que su propuesta prospere.
Bajo la premisa de que la propuesta de Damm se lleve adelante frente a la propuesta de Sodesco -que no da un número predeterminado de miembros-, hacerse con uno de los asientos del consejo de Pescanova en las dos semanas que restan para la celebración de la junta saldría barato. Por 410 euros y siempre y cuando se encuentren uno o varios accionistas de la compañía con ganas de desprenderse de su participación, un inversor podría adquirir los títulos suficientes para poder solicitar un asiento en el consejo de Pescanova. Eso sí, siempre que logre comprarlos a 0,001 euros cada uno.