Londres da luz verde al ataque sobre Siria mientras la ONU pide tiempo
El Consejo Nacional de Seguridad del Reino Unido consideró hoy “inaceptable” el uso de armas químicas por el régimen sirio de Bachar al Asad, tras una reunión de urgencia celebrada bajo la presidencia del primer ministro, David Cameron. Cameron informó de que, por unanimidad, ese órgano que integra a los responsables de seguridad, defensa e inteligencia del Reino Unido consideró que “el mundo no puede tolerar” el uso de armas químicas en Siria.
“El Consejo Nacional de Seguridad acordó, por unanimidad, que el uso de armas químicas por Al Asad es inaceptable y que el mundo no puede tolerarlo”, indicó el “premier” británico en su cuenta de Twitter. En esa reunión, celebrada en Downing Street, participaron, entre otros, los responsables del Ejército y del MI6, además del ministro de Defensa, Philip Hammond, y de Interior, Theresa May.
Downing Street avisó ayer de que el Ejército británico tiene un plan de contingencia para una posible intervención militar en Siria. Mañana el Parlamento se reunirá con carácter de urgencia, interrumpiendo el receso veraniego, para votar la respuesta del Reino Unido al supuesto ataque con armas químicas ocurrido el pasado día 21 cerca de Damasco y que causó centenares de muertos.
Mientras, en Nueva York, Londres va a presentar un borrador de resolución ante el Consejo de Seguridad en el que le pide que autorice las “medidas necesarias para proteger a los civiles” en Siria. El borrador de resolución preparado por el Reino Unido condenará el supuesto uso de armamento químico por parte del régimen de Bachar al Asad y pedirá a la ONU que asuma su responsabilidad con Siria.
No obstante, tiene pocas posibilidades de prosperar debido a que anteriores proyectos de resoluciones de condena del régimen sirio han fracasado en la ONU debido a la oposición de Rusia.
La prensa estadounidense ya ha informado de que la Casa Blanca prevé lanzar dos ataques con misilies guiados sobre objetivos militares en Siria, aunque se espera que antes presente un informe con las pruebas sobre la autoría del ataque químico. Hoy el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha asegurado que información de diferentes fuentes apunta al uso de armas químicas por parte de Damasco.
Desde la propia ONU, mientras tanto, se pide más tiempo. El secretario general Ban Ki-moon, explicó que los inspectores de la ONU necesitan cuatro días para concluir su investigación sobre el supuesto ataque con armas químicas y después tendrán que analizar los hallazgos e informar al Consejo de Seguridad.
Ban no quiso especular sobre una posible respuesta de la comunidad internacional al supuesto ataque químico hace una semana, al afirmar que su responsabilidad “en este momento es conducir y completar la investigación” de los investigadores de la ONU.
“Por eso están trabajando tan duro. Dejémoslos acabar su trabajo de cuatro días y entonces los expertos tendrán que analizar científicamente antes de informar al Consejo de Seguridad, señaló en La Haya, donde se encuentra con motivo de la celebración del primer centenario de la apertura del Palacio de la Paz, sede de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
El secretario general sigue insistiendo en la necesidad de agotar la vía diplomática. “Demos una oportunidad a la paz, demos una oportunidad a la diplomacia”, dijo Ban, que instó a la comunidad internacional a permitir al Consejo de Seguridad realizar su papel como autoriad para la paz.
El régimen de Damasco, mientras, ha presentado al Consejo de Seguridad de la ONU “pruebas” que supuestamente vinculan a los opositores con el ataque químico de hace una semana que causó la muerte de cientos de personas a las afueras de Damasco.
“Hemos entregado a Naciones Unidas todas las pruebas y documentos que muestran que fue la oposición, no el Estado, la que utilizó armas químicas”, apuntó a los periodistas el viceministro sirio de Asuntos Exteriores, Faisal Miqdad, tras haber mantenido conversaciones con funcionarios de la ONU. Miqdad explicó que el régimen sirio entregó ayer esas presuntas evidencias del ataque e insistió en que nunca usarían armas químicas contra su pueblo “en caso de que las tuvieran”.