¿Por qué con impuestos tan altos, España recauda tan poco?
La mesa de asesores tiene un perfil más académico que político, pero ideológicamente está cerca de Montoro Los expertos presentarán su propuesta de reforma fiscal en febrero del próximo año
Los expertos tributarios pueden discrepar en las medidas que precisa actualmente España, sin embargo, todos coinciden en un punto: el sistema tributario no funciona y es ineficiente. El boom inmobiliario camufló durante años las muchas debilidades que presenta un modelo tributario caracterizado por unos tipos impositivos muy elevados y una baja capacidad recaudatoria. En 2012, los ingresos públicos en España representaron el 36,4% del PIB, diez puntos por debajo de la zona euro. Incluso Grecia recauda más (44,7%). En términos de ingresos, España está más cerca de países de Europa del Este como Rumanía que de los Estados de la vieja Europa.
El Ejecutivo ha decidido emprender en 2015 una reforma tributaria integral y el Consejo de Ministros nombró el viernes una comisión de expertos que deberán presentar sus propuestas en febrero de 2014. Los nueve integrantes tienen un perfil más académico que político, aunque la mayoría puede ubicarse en corrientes liberales y conservadoras. Presidirá la comisión Manuel Lagares, catedrático de Hacienda Pública que ha estado presente como asesor en prácticamente todas las grandes reformas tributarias.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ya encargó que la propuesta de reforma “simplifique” el actual modelo. Este término, en el ámbito fiscal, significa suprimir deducciones y eliminar regímenes especiales. La vicepresidenta también apuntó que el futuro sistema tributario deberá estar al servicio del crecimiento económico, salvaguardar la unidad de mercado y garantizar la neutralidad fiscal. Estos son los retos que debe afrontar la comisión de expertos:
IRPF
El principal impuesto por recaudación tiene siete tramos y el tipo máximo se sitúa en el 52% con carácter general, nivel que en algunas comunidades como Cataluña alcanza el 56%. Solo Suecia mantiene tipos superiores en Europa. En 2015, el Gobierno ya se ha comprometido a rebajar el IRPF para situarlo, como mínimo, en el nivel anterior al aumento aprobado por Mariano Rajoy.
En cualquier caso, todo apunta que los expertos optarán por simplificar el impuesto, lo que implica rebajar el número de tramos y eliminar deducciones. En principio, parece que la reducción fiscal por aportaciones a planes de pensiones quedará salvaguardada en la medida en que el Ejecutivo reclamó que la reforma fiscal fomente el ahorro.
Impuesto sobre sociedades
Es, con diferencia, el tributo que mejor ilustra la ineficacia del sistema. España mantiene un gravamen del 30%, uno de los más altos de Europa y, sin embargo, es de los países que menos recauda. Los ingresos derivados del impuesto que grava los beneficios empresariales se mueven en torno al 2% del PIB, muy por debajo de la media europea. De hecho, Chipre, catalogado por muchas jurisdicciones como paraíso fiscal, mantiene un tipo del 10% e ingresa el triple que España.
Por otra parte, el impuesto sobre sociedades español cuenta con cierta progresividad que solo se refleja sobre el papel. La legislación establece un tipo del 25% para las pymes frente al 30% general. Sin embargo, la multitud de deducciones provoca que, en realidad, una multinacional tribute a tipos inferiores que una pequeña empresa. Es decir, una compañía como Google puede pagar, en España, menos impuestos en términos relativos que una pyme. Respecto al impuesto sobre sociedades, los expertos defienden eliminar deducciones, lo que abriría la posibilidad de rebajar el tipo impositivo.
IVA
Con la última subida aprobada por Rajoy, el tipo general de IVA en España se situó en el 21%, un nivel en torno a la media. En cualquier caso, Bruselas reclama reducir el número de productos que aplican el gravamen reducido del 10% y el superreducido del 4%. No es descartable que los expertos propongan alguna medida en este sentido.
Comunidades autónomas
La disparidad fiscal autonómica, que provoca que una herencia pueda quedar exenta en un territorio y tributar en otro, se abordará en la comisión. En este punto, la opinión mayoritaria es permitir cierta autonomía fiscal de las comunidades, pero dentro de unos parámetros fijados por el Estado para evitar desigualdades como las vigentes.
