Las reticencias de varios bancos ponen en jaque la refinanciación de Pescanova
Nuevo revés para Pescanova. La firma del crédito urgente de 55 millones de euros solicitado por el grupo alimentario para garantizar su actividad ha vuelto a quedar en suspenso. Deloitte, la firma elegida por el administrador concursal, había emplazado a las principales entidades acreedoras para firmar la operación esta misma semana, pero las reticencias mostradas por algunas de las entidades, entre las que se encuentran Bankia y Deutsche Bank, la han aplazado.
Fuentes financieras aseguran que la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri ha decidido no dar el visto bueno al préstamo, al menos hasta que este cuente con la aprobación del juez mercantil. Por su parte, Deutsche Bank, que en principio sí había dado luz verde, ahora se ha descolgado. La entidad alemana había puesto como condición que en el grupo de entidades figurara otro grupo extranjero, algo que de momento no ha ocurrido. De hecho, Deloitte, había intentado convencer a Commerzbank, pero el banco alemán también ha rechazado participar.
De momento, la operación ha sido aprobada por los comités de riesgos de seis entidades. Cuatro de los integrantes del antiguo steering committee, el grupo que se formó tras la solicitud de concurso voluntario de acreedores de la compañía –Sabadell, Novagalicia Banco, Popular, CaixaBank– y los dos grandes bancos, Santander y BBVA.
La Xunta de Galicia también ha manifestado oficialmente que aportará cuatro millones de euros a la firma pesquera.
Durante los próximos días, Deloitte seguirá manteniendo negociaciones con los bancos más reticentes, así como con otras entidades financieras, para intentar que respalden el crédito que evite el colapso de la firma presidida por Manuel Fernández de Sousa.
Según ha manifestado la compañía pesquera a las entidades acreedoras, el destino de los 55 millones de euros serán las filiales extranjeras de Pescanova.
La deuda del grupo podría rondar los 3.500 millones de euros.
Sousa pide a los críticos “respeto” con el consejo
El presidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, (sin poderes ejecutivos ni patrimoniales en la empresa, por orden judicial) ha justificado su permanencia en la multinacional pesquera, a pesar de estar imputado, por el apoyo de la mayoría del consejo, y ha pedido a los críticos que sean “respetuosos”. En una entrevista en el programa Espejo Público de Antena 3, recogida por Europa Press, Fernández de Sousa reconoció que “algunos prefieren” que se vaya de la empresa, pero precisó que él cree “en la democracia”, y que “las empresas funcionan por mayorías”. “Si un consejo elige mayoritariamente y varias veces que yo siga, tengo que ser respetuoso con quien no está de acuerdo, pero los que no están de acuerdo tienen que ser respetuosos con la opinión de la mayoría”, concluyó.