Regreso al corazón de Abengoa
La empresa afronta el actual entorno económico y financiero reduciendo deuda gracias a desinversiones en sectores ajenos a su principal actividad
Cierto optimismo, eso es lo que intentamos transmitir con noticias sobre los nuevos proyectos que llevamos a cabo”. Así se refieren en Abengoa al uso que la compañía está haciendo de su presencia en internet y las redes sociales, en pleno agravamiento de la crisis y cuando las renovables sufren.
Para la empresa, un gigante que emplea a más de 26.000 personas, el mundo online se ha convertido en el mejor modo de “potenciar la imagen de marca de Abengoa, la concienciación social sobre el cambio climático y la necesidad de un nuevo modelo energético”, comentan en la compañía.
En ese sentido, “cada vez nos cuesta menos encontrar personas que se identifiquen con el mundo por el que apostamos, que quieran trabajar en Abengoa, y a ellos cada vez les cuesta menos encontrarnos”.
Estados Unidos ya representa cerca del 27% de las ventas de la compañía
Ese encuentro hoy se realiza por todo el mundo, tras la búsqueda de mercado fuera que la empresa arrancó en los años sesenta y que está haciendo de bastón para soportar el envite a las renovables en España.
Las últimas reformas regulatorias han hecho caer un 35% los ingresos en la actividad termosolar de Abengoa, según los resultados del primer trimestre, y la compañía, como todas las energéticas, está a la espera de nuevas supuestas medidas en el sector que el Gobierno prevé aprobar antes del verano.
“Expropiación” de Industria
Manuel Sánchez Ortega, consejero delegado de Abengoa, no ha dudado en tildar los cambios regulatorios del Gobierno en el sector energético de “expropiación” por incumplir sus compromisos en la regulación de la termosolar, en referencia a la obligación impuesta por el Ejecutivo de acudir al mercado libre, sin primas, y a la tasa del 7% para toda la generación eléctrica.
Así, no sorprende que el 80% de las ventas de su ingeniería y operación en termosolar, biocombustibles, desalación de agua de mar y reciclaje de metales se realice en el exterior, que contribuye cada vez más a los resultados de la compañía. Estados Unidos ya absorbe casi el 27% de la facturación de Abengoa, que prevé salir a Bolsa en ese país próximamente.
La apuesta por los mercados extranjeros se fortalecerá en los próximos meses, dada la incierta situación que dejan los sucesivos cambios regulatorios de Industria. Manuel Sánchez Ortega, consejero delegado de Abengoa, anunció en marzo ante los inversores la intención de congelar las inversiones en energía termosolar en España una vez estén en marcha a finales de año dos plantas que suman 100 megavatios en Cáceres.
El gasto en I+D, una partida tradicionalmente muy relevante para la compañía, permaneció en 91 millones de euros en 2012, el mismo presupuesto que el año anterior.
Adaptarse al actual entorno económico y financiero pasará por abandonar aquellas empresas y sectores que se salgan del corazón de su negocio. En esa dirección se ha enfocado la venta de Befesa, que ha contribuido a reducir la deuda corporativa de la compañía en 400 millones de euros y la deuda consolidada en cerca de 1.000 millones. Abengoa también se ha desprendido de Telvent.