Lamborghini lanza la versión descapotable del Aventador
Qué tienen en común Cristiano Ronaldo y el jugador de Los Angeles Lakers Cobe Bryant? Además de una considerable fortuna, ambos guardan en su garaje un Lamborghini Aventador.
Desde su lanzamiento en 2011 el éxito de este deportivo ha sido enorme, y se ha vendido mejor que todos sus antecesores (Murciélago, Diablo, Countach o Miura). El año pasado la marca italiana, controlada por Audi, adjudicó 927 unidades de su modelo estrella, una cifra muy alta para un coche de estas características. En la actualidad el plazo de entrega para recibir uno de estos biplazas ronda los 15 meses, y previsiblemente subirá con la llegada del nuevo Roadster.
El secreto es que ofrece mucho por un precio competitivo, ya cuesta en España 407.000 euros, una cifra muy alta pero también muy inferior a la de un Bugatti Veyron o un Pagani Huayra, coches con un nivel de espectacularidad y prestaciones similares. El Aventador Roadster puede presumir de que, hoy por hoy, es el único descapotable del mercado con motor central de 12 cilindros.
La novedad en la gama es la versión descapotable, que comparte toda la mecánica de la versión cerrada. Esto implica una bastidor central de fibra de carbono con subchasis delantero y trasero de aluminio, y un motor V12 en posición central que rinde 700 CV a 8.250 rpm. Una cifra impactante es que, a este régimen, cada pistón recorre 21 metros por segundo. Además, emplea tracción a las cuatro ruedas y cambio ISR de tipo manual automatizado (no automático convencional y tampoco de doble embrague), que puede cambiar en solo 50 milisegundos mediante las levas colocadas en el volante. Este permite elegir entre cinco modos diferentes de uso, tres manuales (Strada, Sport, Corsa) y dos automáticos (Strada Auto y Sport Auto).
El techo desmontable está formado por dos piezas de fibra de carbono que se pueden guardar en el maletero delantero. Cada una de ellas pesa menos de seis kilos, de modo que es fácil manipularlas. Los técnicos han preferido esta solución a un techo de accionamiento electrohidráulico, que no permitiría una línea tan limpia y además añadiría mucho peso. El nuevo techo desmontable es sobre todo mucho más cómodo que el de lona que llevaba su antecesor, el Murciélago Roadster, cuyo montaje y desmontaje era una pesadilla. Además, la luna trasera se puede subir o bajar, para controlar no solo las turbulencias, sino también el estremecedor sonido que sale del escape.
El Roaster acelera de 0 a 100 km/h en tres segundos, una décima más lento que su hermano cupé debido a un sobrepeso de 50 kilos. Supera los 350 por hora tanto con techo como sin techo, dejando en ridículo los 170 a los que estaba limitado el Murciélago cuando llevaba montado su techo de loneta. Este es un coche extremo y sin compromisos, como debe ser un Lamborghini. Por eso las marchas pasan de una a otra con poca suavidad. Lamborghini podría haber logrado un funcionamiento más suave utilizando una de las cajas de doble embrague, pero la marca quiere que sus coches tengan personalidad.
El hecho de que esté integrada en el grupo Volkswagen solo se nota en la gran calidad de los productos, porque la personalidad es la misma de antaño, extrema y exótica. En la misma línea, la suspensión se ha suavizado un poco con respecto a los primeros Aventador, pero sigue siendo dura.
Pronto Lamborghini contará con un tercer modelo en la gama, además del Gallardo y el Aventador. Se especuló con la posibilidad de una berlina de cuatro puertas basada en el prototipo Estoque, pero finalmente será un todocamino que se posicionará por encima del Porsche Cayenne o el Mercedes Clase M AMG.
Los orígenes
El primer Lamborghini fue un tractor de 1948 que Ferruccio Lamborghini construyó cuando tenía 32 años, con piezas de vehículos militares americanos. A principios de los años sesenta el negocio iba tan bien que ya conducía un Ferrari. Tenía problemas con el embrague y habló con Enzo Ferrari, que le dijo más o menos que el problema era su forma de conducir. Antes semejante ofensa, Feruccio creó su deportivo. El primer modelo de serie fue el 350 GT de 1963 (en la imagen), con un motor V12 de 280 CV. Para conmemorarlo, entre los pasados días 7 y 11 de mayo se celebró el Grande Giro, en el que cientos propietarios y distribuidores de todo el mundo recorrieron juntos más de 1.200 km por Italia. Además han puesto a la venta una versión especial 50 aniversario del Aventador, con 20 CV adicionales (rinde 720 CV) y algunos detalles tanto exteriores como interiores.