Los sindicatos apoyan la decisión del juez
La decisión tomada por el juez de retirar a Manuel Fernández de Sousa y al resto de consejeros de la dirección de Pescanova tiene el apoyo de las fuerzas sindicales.
“Es un paso muy positivo porque va a permitir comenzar a negociar la deuda con las entidades bancarias, que exigían esta condición para iniciar los contactos”, comentó ayer Francisco Vilar, responsable de la federación de alimentación de CC OO, sindicato mayoritario en Pescanova con 25 delegados, en una conversación telefónica mantenida con este diario.
“Es una decisión acertada debido el daño incalificable que han hecho a la firma”, afirmó José Fernández Piñeiro, secretario general de alimentación de CIG , tercera fuerza sindical con ocho delegados.
El secretario general de CUT, sindicato minoritario en la firma gallega, Ricardo Castro, también coincidió ayer con el resto de representantes sindicales al afirmar que se trata de “una medida que tenía que darse”.
Una vez aceptado el concurso por el juez y apartado a Sousa, “lo principal es elaborar un plan estratégico para conocer la reorganización que va a tener lugar en el grupo y las ventas de activos que se van a producir”, dijo Piñeiro.
En este punto, los sindicatos se muestran cada vez más preocupados. Consideran que la pérdida de puestos de trabajo en Galicia va a ser imposible de evitar. “Dudamos de la viabilidad de la empresa porque cada día aparecen datos nuevos acerca de la deuda que acumula”, manifestó el portavoz de CUT.
CC OO sigue confiando en la compañía gallega. “El grupo es viable y el peso de la crisis no debería caer sobre los trabajadores. Consideramos que puede mantener el personal y la actividad industrial”, señaló Francisco Vilar. CC OO tiene previsto reunirse hoy con el juez para trasladarle su preocupación por la situación y poder acceder a toda la información del proceso.
Pescanova emplea a más de 1.000 personas en Galicia. En el mundo, la plantilla total del grupo con sede en Pontevedra es superior a las 10.000 personas.
En Latinoamérica las filiales de Pescanova emplean a cerca de 8.000 trabajadores. Argentina, Chile, Uruguay y Brasil son algunos de los países de la región en los que está presente la multinacional gallega. En Portugal, Irlanda, Francia, Italia, Grecia y Polonia el grupo da trabajo a unas 400 personas. En África, Pescanova emplea a 700 personas en Mozambique, Namibia, Sudáfrica y Angola, según datos comunicados por la empresa en 2011.