Cosas bien hechas en la automoción
El sector de automoción es la demostración más clara de las posibilidades que tiene la economía española en el campo de la industria. La competitividad de las plantas instaladas en España, entre las que están algunas de las más eficaces según reconocen las mismas multinacionales del motor, es la llave para superar la crisis y la constatación evidente de que para pisar fuerte en un mercado hay que ofrecer más que precio. En esta línea se manifestó ayer en el Foro CincoDías el secretario de Estado de Comercio. Para Jaime García-Legaz, la atracción de inversiones hacia España del sector de automoción es “un buen ejemplo de cómo hay que hacer las cosas”. En efecto, tanto las empresas como los representantes de los trabajadores han sabido alcanzar importantes y acertados acuerdos, con la flexibilidad como principal filosofía, que además de poner de manifiesto el realismo y responsabilidad de unas y otros llevan de la mano jugosas inversiones e imprescindible carga de trabajo. En este sentido, es deseable que las negociaciones que en estos momentos protagonizan General Motors y los sindicatos sobre la planta zaragozana de Figueruelas lleguen a buen puerto. Porque una vez más forman parte de la estrategia mundial de un grupo que, como el resto del sector, tiene su sede de decisión fuera de España.