España fue el país de la UE que más redujo su déficit comercial
El desfase entre ventas y compras al exterior de Francia triplica al español Alemania y Holanda registraron los mayores superavit en la UE
El déficit comercial español, que mide la diferencia negativa entre exportaciones e importaciones, se elevó a 50.300 millones de euros a finales de 2011. Solo un año después, esa cifra se ha reducido hasta los 31.800 millones, lo que representa un ajuste del 37% en términos relativos o de 18.500 millones en términos absolutos. Eurostat, la oficina estadística de la Comisión Europea, certificó ayer que ese recorte fue el más importante entre todos los países de la UE el pasado ejercicio, lo que le permite estrechar la elevada diferencia que le separa de los países europeos con superávit comercial (Alemania y Holanda). Pese al gran ajuste acometido en 2012, España se mantiene como la segunda nación con mayor déficit comercial de la UE, aunque ya a una gran distancia de Francia.
Especialmente significativo es el caso de este último país, cuyo déficit comercial, pese a reducirse por encima del 10%, se situó a finales de 2012 en 81.500 millones de euros, confirmándose como la nación con mayor diferencia negativa entre exportaciones e importaciones. En el otro lado se sitúa Alemania, con un superávit de 186.700 millones de euros, lo que supone una mejora anual del 19%, seguida por Holanda, con un saldo positivo de 50.500 millones y un alza de 1.600 millones respecto al mismo período del ejercicio anterior.
Ante la debilidad económica de la zona euro (la gran mayoría de países estaba en recesión en el cuarto trimestre de 2012 y Alemania registró tasas negativas), los intercambios comerciales se han orientado hacia Reino Unido y algunos destinos de Asia y América. En concreto, las empresas de la zona euro han optado por elevar de forma continuada sus ventas a EE UU, que ha estado a punto de superar a Reino Unido como el primer comprador de la zona euro. En 2011 importó bienes por valor de 200.000 millones de euros; doce meses después lo elevó hasta 223.000 millones, quedándose a tan solo 6.000 millones de Reino Unido, el primer cliente. Si el análisis se extiende a toda la UE, EE UU sí aparece como el mayor importador.
10.000 millones de euros menos en importaciones
El ajuste del déficit comercial en España se ha producido por dos factores. En primer lugar, las exportaciones han crecido un 4%, por encima de la media europea, gracias al buen comportamiento experimentado por los países emergentes como Turquía, Marruecos o China, cuya cuota de mercado ha crecido con fuerza. Al mismo tiempo, las importaciones han sufrido un ajuste del 4%, en gran medida por el impacto de la crisis económica, que ha provocado un desplome del consumo y de la inversión empresarial. Eso ha provocado un recorte de 10.000 millones de en las compras al exterior que, sin duda, ha servido para atenuar el peso creciente que la compra de energía (España solo produce el 0,2% de la energía que consume) tiene en la balanza comercial española. Sin esa partida tendría superávit comercial.