_
_
_
_
La entidad firmará un protocolo de fusión antes del 15 de enero

Santander ajustará su plantilla en unos 3.000 empleados al absorber Banesto

La dirección de Santander tiene previsto reunirse con los sindicatos el 9 de enero para abordar la reestructuración del grupo en España tras la absorción de Banesto. Las salidas se realizarán a través de prejubilaciones, bajas incentivadas y recolocaciones en filiales del grupo, y afectarán a alrededor de 3.000 empleados.

Oficina de Banesto en Madrid.
Oficina de Banesto en Madrid.Cinco Días

Frenética actividad en las diferentes áreas de Santander y Banesto afectadas por la reestructuración del grupo en España. La cúpula de la entidad quiere resolver lo antes posible los pormenores del proceso de ajuste que deben abordarse en la red de oficinas y en la plantilla tras la absorción de Banesto por parte de Santander.

De momento, el comité que dirige la fusión y que preside el consejero delegado del grupo, Alfredo Sáenz, se reunirá el próximo 8 de enero, primer día laborable tras las fiestas navideñas. Un día después, el 9 de enero, será cuando se abra oficialmente las negociaciones con los sindicatos, reunión a la que ya han sido convocados.

Como paso previo, el grupo ya ha mantenidos contactos con CC OO y UGT, sindicatos mayoritarios en el sector, en las que les ha garantizado que los ajustes de plantilla que se lleven a cabo se realizarán sin aplicar medidas traumáticas. De hecho, tanto el banco como los sindicatos descartan por completo tener que acudir a un expediente de regulación de empleo (ERE) como viene realizándose en las antiguas cajas de ahorros, ya que la situación es muy distinta. Santander es un grupo totalmente solvente.

La dirección de Santander y Banesto se ha comprometido, de hecho, a firmar un protocolo marco laboral de fusión como reclaman los representantes sindicales. El objetivo es sellar este acuerdo antes del día 15 de este mes. En esta propuesta se recogerán las condiciones genéricas del ajuste laboral, que se realizará a través de prejubilaciones y bajas incentivadas principalmente. Además, se llevarán a cabo recolocaciones en filiales del grupo, incluidas las extranjeras.

También está previsto que incluya, como han pedido los sindicatos, una figura que ya se empleó en los años 90, aunque sin demasiada aceptación, la excedencia remunerada. Esta medida tendría una vigencia de cuatro años en los que el empleado que se acoja a ella recibiría una anualidad repartida en cuatro años, según fuentes sindicales.

Aunque el banco asegura que todavía no ha cerrado el número de posibles afectados por el ajuste de la absorción de Banesto y Banif, en los contactos previos con los sindicatos las cifras que se han barajado de salidas de trabajadores ascienden entre 3.000 y un máximo de 4.000 empleados. Fuentes de Comfia-CC OO y cercanos a la empresa afirman que, según sus cálculos, el número de salidas será más cercana a los 3.000 empleados.

El banco ya anunció el pasado 17 de diciembre que el objetivo era cerrar 700 oficinas en España, para operar con la marca Santander con 4.000 sucursales. Estos cierres (descarta la venta de esta red) irán acompañados de una drástica salida de empleados del grupo. "El personal se va a reducir bastante, pero de forma progresiva".

El grupo Santander cuenta en España con 31.531 empleados, de los que 9.178 trabajan en Banesto y 17.931 en la red que dirige Enrique García Candelas. Una parte destacada de las salidas se producirán en los servicios centrales de Banesto, donde trabajan alrededor de 1.500 personas. De ellas, unas 500 podrían pasar a filiales del grupo, según fuentes sindicales.

Entre Banesto, Santander y Banif hay en la actualidad unos 3.000 empleados con más de 55 años de edad, cifra que aumentará en los próximos años. Los sindicatos recuerdan que este proceso de ajuste no se realizará en un ejercicio, sino en tres como máximo, aunque el banco explicó a los analistas cuando se anunció la operación que el objetivo era finalizar el ajuste en dos ejercicios.

Los sindicatos cuentan con un referente de ajuste en el grupo. Santander Consumer, la filial de crédito al consumo. Esta reestructuración se realizó poco después de iniciarse la crisis financiera en España hace cuatro años. En ese proceso las salidas de personal se saldaron con unas indemnizaciones de 60 días por año trabajado, con un tope de 42 mensualidades.

Ahora los sindicatos esperan una propuesta inferior, pero aseguran que estará muy por encima de la reforma laboral. Como referente de mínimos tienen el protocolo alcanzado el año pasado entre Popular y Pastor.

La reestructuración de Banif será más suave

La reestructuración del grupo Santander en España afectará a su filial de banca privada Banif. Este banco, con 52 sucursales, también será absorbida por Santander. Pese a ello, varias fuentes aseguran que su reestructuración será menor que la que sufrirá Banesto. Fuentes financieras conocedoras del proyecto del grupo afirman que la idea inicial es conservar estas 502 oficinas, situadas una por provincia para realizar lo que ya hacia, banca privada, aunque ahora operará bajo la marca Santander. No en vano, el grupo quiere impulsar su división de banca privada, la primera de España por volumen de activos. Tras la reestructuración, el objetivo del grupo es contar en el mercado doméstico con tres redes de oficinas bien diferenciadas: de banca comercial, de empresas y de banca privada. El grupo prevé tener en España una cuota por oficinas en 2015 del 13%.

Archivado En

_
_