Ryanair reta a Aena y amenaza con recortar un tercio la actividad si no rebaja las tasas
La aerolínea irlandesa de bajo coste Ryanair amenaza con reducir un 35% y un 23% la oferta de vuelos que tiene en Madrid y Barcelona, respectivamente, por la subida de tasas realizada el pasado mes de julio por Aena. El operador público está dispuesto a aguantar el pulso: dice tener precios por debajo de la media de los aeropuertos europeos y que no cubre costes con sus tasas.
La aerolínea irlandesa Ryanair se ha plantado ante la subida de tasas de Aena. Dice estar dispuesta a reducir hasta un tercio sus operaciones desde Madrid y Barcelona si el operador dependiente del Ministerio de Fomento no renuncia a encarecer las operaciones en Barajas y El Prat.
La empresa irlandesa pretende dejar de operar un 35% de los vuelos que tiene en Madrid y un 27% de los que parten de la capital catalana. Todo como respuesta a la subida de tasas del pasado julio. La semana pasada fue Air France la que criticó un alza del 19% en la red de Aena en 2012. La aerolínea francesa añadió que espera un nuevo encarecimiento del 8,5% en 2013: "Hay una correlación directa entre el precio de los billetes y el número de viajeros que llegan a un país. En Holanda lo vieron y rectificaron a tiempo", advirtió el director general de Air France en España, Vincent Coste el miércoles 21. Otra aerolínea que manifestó su malestar públicamente fue Lufthansa.
Más contundente aún en la protesta, Ryanair calcula que si mantuviera el nivel de tráfico de 2012 durante el próximo ejercicio, el coste operacional teniendo en cuenta la subida de tasas sería de 75 a 80 millones.
Ajuste veraniego
El vicepresidente de la aerolínea irlandesa, Michael Cawley, afirmó ayer que el pretendido recorte de producción desde España se ejecutará a partir del 30 de marzo de 2013, salvo que "la empresa aeroportuaria imponga las mismas tasas que tenía antes".
En Madrid, Ryanair tiene previsto dejar 10 aviones, de los 14 que posee en la actualidad, y cancelar 13 rutas, entre las que destacan importantes destinos como Fráncfurt (Hahn), Londres (Gatwick) y Turín, a nivel internacional, y Almería y Girona, a nivel nacional.
Además, baraja aminorar las frecuencias de otros 22 itinerarios, para pasar de 782 vuelos semanales a 510, por lo que rutas a Roma, Milán (Bérgamo) y Bruselas (Charleroi) verían disminuidas sus tres frecuencias semanales actuales a dos o una, según Cawley.
En cuanto a Barcelona, el recorte de la oferta del 23% en sus vuelos se traduciría en el uso de un avión menos y la cancelación de cuatro rutas, así como 170 vuelos semanales menos en otros 20 trayectos.
La reducción de capacidad de la aerolínea irlandesa rondaría el 15%. Además, la menor frecuencia de vuelos en Madrid y Barcelona para el verano supondría la pérdida de 4,5 millones de pasajeros y de 4.500 puestos de trabajo indirectos.
La compañía ha afirmado que tiene siete aviones nuevos, que sumados a los cinco que obtendrían de la reducción en los aeropuertos españoles, conforman un total de 12 aviones que pretende reubicar en otros destinos.
Ryanair ha transportado un total de 31,7 millones de pasajeros hasta octubre en los aeropuertos de la red española de Aena, copando el 18,5% de los pasajeros que pasaron por los aeródromos españoles. Sus principales rivales son Vueling, con 18 millones de pasajeros, e Iberia con 17,5 millones hasta octubre.
La respuesta desde el entorno de Aena no se hizo esperar ayer: "El hueco que dejen lo ocupará otra compañía, como ya pasó en Alicante". El pulso está servido y como espectador está la Comisión Europea, donde se ha abierto una investigación sobre la política de tasas de Aena. La ministra de Fomento, Ana Pastor, comentó en el Foro CincoDías del martes que las tasas españolas siguen siendo más baratas que la de los principales aeropuertos europeos y valoró en 0,85 euros por billete el impacto del incremento tarifario.