El Ibex contiene la euforia y la prima cae aliviada a 371 puntos
El Ibex ha contenido hoy la euforia con la que había reaccionado ante la cercanía de la petición española de rescate. Ha cerrado con una caída del 0,34%, después de mantener ligeras pérdidas durante casi toda la jornada. La prima de riesgo en cambio prosigue su caída y ha descendido a 371 puntos, aliviada por el éxito de la subasta del Tesoro.
Los líderes europeos han dado comienzo esta tarde en Bruselas a la enésima cumbre para buscar soluciones a la interminable crisis de deuda soberana que azota a la zona euro y que tiene en su epicentro a España. De hecho, y sin que figure en el orden del día, la concesión de ayuda al país para evitar que pierda sin remedio su acceso a la financiación de los mercados es el tema protagonista y el que tiene absolutamente en vilo a los inversores. Aun así, no se esperan avances determinantes en la reunión de hoy sobre la petición española de rescate. "No esperamos que inmediatamente después de la misma España solicite el rescate, pero sí que se establezcan las bases para que lo pueda hacer en el corto plazo", reconocen en Link Securities.
La poderosa capacidad de compra de BCE si España solicita la ayuda, y que el mercado descuenta con cada vez más convicción, sigue rebajando la presión sobre los bonos españoles. La prima de riesgo ha vuelto a caer gracias al éxito de la subasta de bonos de hoy, que incluyó el plazo de diez años, y en la que el Tesoro ha colocado un importe de 4.610 millones de euros, por encima de lo previsto, y a tipos de interés inferiores. La prima de riesgo española, que ayer perforó el nivel psicológico de los 400 puntos, hoy ha caído hasta los 371 puntos. El nivel parece confortable en comparación con los 650 puntos que rozó en el verano y se ha enfriado considerablemente en las últimas sesiones. "Lo que ha quedado claro es que los inversores que todavía mantenía posiciones cortas en bonos españoles optaron ayer por cerrarlas a toda prisa tras el anuncio de Moody's", explican en Link.
La renta variable europea también ha vivido jornadas dulces, toda vez que parece que la crisis de deuda (que no la económica) parece estar tocando a su fin. Hoy, tras una apertura anodida, las órdenes de venta han sido más fuertes. Después del avance del 2,37% de ayer, el selectivo ha pasado casi toda la jornada en terreno negativo y ha cerrado con una ligera caída del 0,34%, hasta los 8.100 puntos. Ha intentado sin éxito conquistar el terreno positivo al cierre pero salva en cualquier caso la cota de los 8.000 puntos.
Y es que ha sido una semana de noticias medianamente alentadoras: el buen resultado de la subasta de letras a 12 y 18 meses celebrada el martes, que además hace prever una buena colocación hoy, esta vez con bonos de hasta diez años. Moody's por su parte, por una vez ha incumplido el guión previsto y no ha rebajado la deuda española al nivel de bono basura. Y, por último, Alemania parece ceder y estar dispuesto a que España se apunte a un rescate de la economía por parte del MEDE, lo que permitirá al BCE comprar deuda en el mercado secundario.
Aun así, la euforia bursátil de los dos días anteriores ya se vio frenada en la apertura al conocerse la ralentización de la economía china, que creció el 7,4% en el tercer trimestre del año, frente al 7,6% del segundo, y tuvo que sortear también el incremento en 46.000 solicitudes de las peticiones semanales de desempleo en Estados Unidos, que alcanzaron las 388.000.
