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Columna
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Más control al capital de la banca

Los bancos europeos podrían estar cerca de recibir parte del amor que necesitan. Pese a los severos test de estrés, los inversores toman los cálculos usados y adornados por las entidades para resolver sus ratios de capital. Se necesita un fuerte supervisor supranacional que pueda con los reguladores nacionales interesados en permitir a los bancos jugar con sus cuentas. El Banco Central Europeo (BCE) se ofrece a ello.

Hasta ahora, el trabajo del BCE ha sido el de fijar la política monetaria en los 17 países de la eurozona. Pero, como dejan claro propuestas como la de la Comisión Europea (CE) del 12 de septiembre, ahora jugará un papel clave en el mecanismo europeo de supervisión y podría acabar directamente vigilando a todos los bancos de la eurozona. Una de las áreas señaladas con razón por la CE como ejemplo de una gran coordinación son los modelos de riesgo internos usados para ponderar los riesgos de los activos bancarios.

Actualmente, los bancos pueden ponderar los riesgos de sus activos usando el llamado método estándar. Pero muchos de los grandes bancos no lo hacen. Están a favor de un enfoque basado en calificaciones internas, que utilizan sus propias suposiciones. Esto incentiva que los bancos usen suposiciones demasiado optimistas, porque después tendrán que tener menos capital.

Si los bancos hubiesen calculado el 60% de sus activos ponderados por riesgo usando el método estandarizado, Deutsche Bank y Barclays necesitarían ahora encontrar otros 5.100 y 6.600 millones de euros de capital. Hasta ahora, los reguladores nacionales han tenido el gran incentivo de hacer la vista gorda con los supuestos muy optimistas, ya que sus propios contribuyentes completarían las carencias de capital.

El BCE puede y debe resolver esto. Cuenta con todos los incentivos para asegurarse de que los modelos son robustos, y la zona euro tiene el Mecanismo Europeo de Estabilidad esperando para recapitalizar cualquier banco que se quede corto.

Por George Hay

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