Alierta recurre a su cúpula ante la coyuntura más complicada
Telefónica comunicó el lunes la renovación de su cúpula directiva aprobada por el consejo. Hay varios cambios, todos bajo la propuesta del presidente César Alierta. El principal es el nombramiento de José María Álvarez-Pallete como consejero delegado en sustitución de Julio Linares, que seguirá siendo miembro del consejo. En la renovación no hay ninguna incorporación de fuera de la compañía. Ninguna cara nueva. Todos ya formaban de una manera u otra parte del equipo que ha ido configurando Alierta en los últimos años.
Álvarez-Pallete, que va a ser el encargado de la gestión del día a día, tiene una larga trayectoria en Telefónica, muy ligada a la del propio Alierta (llegó en 1999 y Alierta fue nombrado presidente en 2000), y casi desde el principio con puestos claves. Entre septiembre de 1999 y julio de 2002 fue director general de finanzas corporativas de la operadora. Desde ese momento y hasta septiembre de 2011 fue presidente de Telefónica Latinoamérica, lo que le confiere un amplio conocimiento de la región, clave para la empresa, al aportar cerca del 50% de los ingresos.
Durante el último año, el ejecutivo ha sido presidente de Telefónica Europa, ya incluyendo la responsabilidad sobre el negocio en España. Quizá, como se comenta en la industria, no ha tenido mucho tiempo para la gestión de la actividad en el Viejo Continente. Entre medias, en julio de 2006, Álvarez-Pallete se incorporó al consejo de administración de la compañía, una situación que le daba relevancia frente a otros miembros del comité ejecutivo.
Para sustituirle en Europa, usando un símil futbolístico, Alierta ha tirado de banquillo al situar en el puesto a Eva Castillo, experta del mundo financiero que ocupó, entre otros puestos, el de máxima responsable de Merrill Lynch Banca Privada para Europa, Oriente Medio y África. Con anterioridad, Castillo trabajó en Beta Capital, la sociedad de Bolsa fundada por el propio Alierta. La ejecutiva fue nombrada consejera de Telefónica a principios de 2008.
A su vez, Santiago Fernández-Valbuena, presidente de Telefónica Latinoamérica, va a pasar a formar parte del consejo de administración, una incorporación muy esperada para un directivo que acumula una larga trayectoria en la teleco. Y es que, antes de este puesto, fue durante años máximo responsable financiero de la operadora.
Los cambios introducidos tienen alguna consecuencia más en la configuración del consejo. El citado nombramiento de Valbuena y la incorporación de Castillo a la presidencia de Telefónica Europa conservando su actual puesto, supone que habrá un consejero ejecutivo más en la operadora. Además, Telefónica anunció el nombramiento de Eduardo Navarro, director de Estrategia y Alianzas de la Compañía, como miembro del comité ejecutivo. El directivo brasileño se ha convertido en uno de los hombres de confianza de Alierta, quien impulsó su nombramiento el pasado año como nuevo responsable de estrategia del grupo y del gabinete de la presidencia.
Lo cierto es que en manos de este equipo está el cumplir una estrategia que ayude a Telefónica a sortear una de las coyunturas más difíciles de su historia. La empresa se enfrenta a un gran reto: reducir su deuda de 58.000 millones de euros. Con sus planes de desinversiones, la operadora ha logrado recuperar confianza entre los inversores (ha rebotado un 44% desde el mínimo anual marcado en julio). Eso sí, ahora debe materializar la salida a Bolsa de Telefónica Alemania y finalizar la venta de Atento.
Cumplir objetivos
Ese será el camino más recto para aminorar la presión de las agencias de rating, que han castigado a Telefónica con varios recortes en la calificación en los últimos meses, y volver a pagar dividendos tras la suspensión aprobada este verano (prevé volver a pagar esta retribución a final de 2013).
La teleco también debe hacer frente a la presión de los competidores en los distintos mercados, especialmente en España. Un mercado que está dirigido por Luis Miguel Gilpérez, hombre cercano a Álvarez-Pallete, que ahora tendrá como responsable a Eva Castillo. Asimismo, Telefónica debe seguir afrontando el desafío de los grandes grupos de internet además de avanzar en el despliegue de las redes de nueva generación, tanto fijas como móviles.
La renovación aprobada por Telefónica viene a demostrar que Alierta confía en sus colaboradores más próximos. En la industria se ha comentado que el presidente también está diseñando una sucesión, pero parece claro que seguirá al pie del cañón. La prueba es que la junta de mayo le reeligió como consejero por otros cinco años más.
Wayra
Apoyo al plan de inversión en 'start-ups'Impulsor: el nombramiento de Álvarez-Pallete supone también un apoyo para Wayra, el programa de inversión en start-ups lanzado por Telefónica en 2011. El directivo fue uno de los creadores de este plan, que la operadora ha extendido ya por Latinoamérica y Europa. Pallete llegó a decir que en Latinoamérica podría surgir en el futuro la idea de un próximo Facebook.