Rajoy intenta ganar tiempo y elude aclarar si España pedirá ser rescatada
Mariano Rajoy no muestra sus cartas. El presidente del Gobierno eludió aclarar ayer si España pedirá el apoyo del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF). Su homólogo Mario Monti descartó de plano que Italia lo vaya a hacer. El BCE insiste en que los países apurados por la deuda deben solicitar la ayuda europea para que el banco actúe.
Una, dos y hasta tres veces rehusó aclarar Mariano Rajoy si España solicitará el rescate al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF). El presidente del Gobierno tuvo que hacer todo tipo de requiebros, verónicas y manoletinas dialécticas para definir qué camino tomará el país tras el jarro de agua fría que le lanzó ayer Fráncfort.
La mañana había empezado con buen pie. La expectativa de que Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE), concretara con actos su apoyo cerrado a la moneda común de la semana pasada facilitó la emisión de bonos soberanos prevista. El Tesoro colocó entre los inversores 3.132 millones de euros a un tipo de entre el 4,9% y el 6,7% en plazos de dos, cuatro y 10 años.
Pero las esperanzas se disiparon a la hora del almuerzo. Draghi retornó a la ortodoxia del discurso germano y recalcó que aquellos países que se vean incapaces de atender sus compromisos de deuda han de solicitar apoyo al fondo de estabilidad para que el BCE pueda actuar. Sus palabras descorcharon la prima de riesgo española, que se disparó durante la tarde hasta los 594 puntos básicos.
Mario Monti trató de tapar la botella desde Madrid. En una intervención pública tras una reunión con su homólogo español, recordó que "el BCE considera que el hecho de que las primas de riesgo de los países suban y bajen puede afectar a la política monetaria de la zona euro". Acto seguido añadía que "los mercados financieros se ajustan cuando una medida ha tenido éxito y no reflejan inmediatamente los avances en cada país".
Rajoy arrimó el hombro y se sumó a estos argumentos. "Hay primas de riesgo excesivamente altas y la fragmentación financiera obstaculiza la política monetaria del BCE", sostuvo.
Actitud del Banco Central Europeo
Mario Monti consideró que el presidente del BCE ha dado un paso significativo en defensa del euro al contemplar que además del actual FEEF y el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) que le sucederá, "puede ser posible que el banco central intervenga por sí mismo y no como agente del fondo de estabilidad".
La divergencia de respuestas entre Rajoy y Monti llegó al ser cuestionados sobre si sus países solicitarán ser rescatados. El líder español eludió la cuestión una y otra vez. Se limitó a reiterar el compromiso de Madrid con las reformas estructurales a pesar de su dureza.
Mario Monti fue mucho más explícito. "No va a haber ayudas, rescate ni salvamento de Italia", dijo. Luego fue más allá al afirmar que "toda la política italiana en estos meses se plantea para no recibir el rescate". Como refrendo de sus palabras, alegó que el presupuesto italiano tiene un déficit del 2%, la mitad de la media europea. Eso sí, Monti dijo que analiza "acciones de acompañamiento para evitar primas de riesgo excesivas".
Rubalcaba critica con dureza al BCE
El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, afirmó ayer que la actual situación de presión que sufren España e Italia en los mercados no responde a los fundamentos de sus economías, sino que es fruto de una especulación.En una comparecencia en Roma al término de su reunión con el líder del Partido Demócrata (PD) italiano, Pierluigi Bersani, el líder de los socialistas españoles manifestó una impresión "negativa y pesimista" ante las conclusiones de la última reunión del Banco Central Europeo (BCE)."Estamos ante un problema político y de opinión pública. Los ciudadanos entienden muy poco lo que está pasando aquí. Pero lo que ocurre es que le están dando una patada al euro en el culo de España y también de Italia", dijo Rubalcaba."España tiene una situación económica difícil. Es probable que si no estuviéramos en el euro nuestra prima de riesgo no sería la alemana o la francesa. Pero hay 300 puntos que España paga por su pertenencia al euro, que no se justifican por nuestros fundamentos económicos (...) Estamos ante un ataque al euro", agregó el político, según Efe.Rubalcaba calificó "hay un abismo" entre el discurso de ayer de Mario Draghi, presidente del BCE, y lo que dijo la semana pasada. "Se ha quedado muy lejos de lo que esperábamos no solo España y Europa, sino también EE UU y el mundo", consideró el líder socialista.