Facebook le cuesta amigos a UBS
UBS está adoptando el hábito de dar desagradables sorpresas en el segundo trimestre. Hace 11 meses, el banco suizo sorprendió a los inversores con una pérdida de 2.000 millones de francos suizos. Ahora ha revelado la pérdida de 350 millones de francos en la fallida OPV de Facebook. En un segundo trimestre ya difícil, es lo último que la reducida banca de inversión de UBS necesitaba. Durante meses, los rivales se han preguntado cómo UBS pudo haberse pillado con Facebook a pesar de no ser colocador en la oferta. Según el banco, su división de renta variable recibió muchas peticiones de acciones de Facebook de gestores de fondos y adinerados clientes. Debido a los problemas técnicos del Nasdaq, repitió las órdenes para quedarse con grandes cantidades de valores no deseados. Suponiendo que UBS pagó un precio medio de 40 dólares por acción y posteriormente vendió a un promedio de 31 dólares, esto implica que el banco terminó con casi 40 millones de acciones -o aproximadamente el 10% del capital cotizado.
UBS dice que emprenderá acciones legales contra Nasdaq por lo que describe como una "mala gestión" de la OPV. Sin embargo, la debacle del segundo trimestre ya está marcada por débiles volúmenes de operaciones y reducidas actividades corporativas financieras: la banca de inversión de UBS volvió a los números rojos.
En otras áreas, sin embargo, le fue bastante bien. Asumiendo la plena aplicación de Basilea III, el ratio de capital Tier 1 del banco mejoró en más de un punto porcentual hasta el 8,8%. Hay también signos de que UBS está recuperando su estatus de refugio para los ricos del mundo: su división de banca privada atrajo 9.500 millones de francos de nuevos fondos en el trimestre. Lo malo es que los clientes reacios al riesgo tienden a acumular efectivo. Como resultado, su margen bruto cayó en cuatro puntos básicos hasta los 89 puntos básicos.
UBS continua disminuyendo su banca de inversión: el objetivo para los activos ponderados por riesgo para 2016 ha caído a 135.000 millones de francos, desde los 170.000 millones de hoy. Pero mientras que UBS siga siendo capaz de producir conmociones no deseadas, los inversores permanecerán cautelosos.
Por Peter Thal Larsen