La OCDE: la ayuda a la banca será asumible para España
No todo son malas noticias para España. Desde París, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, ha dicho que la ayuda que reciba la banca española será asumible para el país puesto que su deuda pública seguirá siendo inferior "al promedio de la OCDE y al promedio europeo".
En una entrevista en París, Gurría dio por buena la cifra de 90.000 millones de euros mencionada en algunos medios de comunicación sobre el cálculo que el Fondo Monetario Internacional (FMI) publicará el lunes como necesidades de capitalización de la banca española.
"No quiero ser demasiado original, vamos a tomar las cifras esas últimas de que se necesitan 90.000 millones de euros", señaló Gurría.
Y precisó que de esa cantidad "España o los bancos podrían aportar 50.000" y que también se podría recurrir a los mecanismos europeos para la cantidad restante, esos 40.000 millones de cifra de ayudas que dice el FMI que necesitaría el sistema financiero y que fue publicada ayer por Reuters.
Insistió en que "esto no es un cataclismo" porque representa "unos puntos de PIB" (Producto Interior Bruto) y aunque se añadan al volumen actual de la deuda pública española, ésta seguirá siendo "inferior al promedio de la OCDE y al promedio europeo", precisó.
"Esto España lo puede hacer, está dentro de sus capacidades, está dentro de sus números", indicó antes de precisar que el dinero que ponga ahora en bancos nacionalizados, si luego se venden cuando las condiciones sean más favorables, podrá dar "beneficios" como ha ocurrido en otros países.
Aunque no quiso fijar plazos concretos, el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) destacó la urgencia de acometer esa recapitalización, porque cuanto más se espere, más costes tendrá.
"Resolvamos el tema de los bancos, Más tarde o más temprano habrá que capitalizar los bancos, por tanto hagámoslo lo más temprano porque el tiempo no es neutral", agregó.
"Cuanto más tiempo pasa, se nos hace una factura más cara" porque "los mercados necesitan más evidencia para convencerse" y se tornan "más severos e inflexibles", argumentó.
Para ilustrarlo, señaló la rebaja anunciada por la agencia de calificación Fitch de la nota a la deuda soberana española: "eso es lo que pasa porque uno deja pasar el tiempo".
Para Gurría, la forma de actuar pasa por "dar señales de cómo se va a abordar el tema. Y los detalles se pueden ir haciendo en el tiempo, pero una vez dado el mensaje" puesto que "lo que quiere el mercado son mensajes, certidumbre".
Otra razón para darse prisa es que "los mercados están vinculando la vulnerabilidad" de la duda soberana española "a la solución" de la recapitalización bancaria.
Este problema "hay que resolverlo de todos modos" y "no nos vamos a ahorrar ni un centavo de lo que hay que hacer" por esperar, de modo que "demos la señal", reiteró.
"A partir de ese momento, cuando los mercados entiendan lo que se va a hacer, cómo se va a hacer y para qué se va a hacer, en ese momento mismo empieza a cambiar la psicología del mercado", concluyó.
Gurría se mostró convencido de que la recapitalización de la banca española, si se hace "bien puede contribuir a desinflar la presión sobre el mercado de bonos soberanos" que "no se justifica de ninguna manera porque España ha hecho los deberes" con sus reformas.
Hizo hincapié en separar las ayudas al sector bancario español con un rescate como el que ha sido necesario para Grecia porque aunque "se requiere una cantidad importante para recapitalizar a los bancos, no estamos hablando del Estado español"
Gurría cargó contra las agencias de calificación, "que están actuando como siempre actúan", con una lógica "procíclica" que se traduce en que "un agujero lo hacen siempre más profundo".
"Son expertos en cavar, cavar y cavar y hacer los agujeros más hondos", señaló finalmente respecto al comportamiento de esas agencias.