España recaba apoyo internacional contra la expropiación de YPF
El Gobierno, los partidos políticos, la CE y otras muchas instituciones apoyan a Repsol ante la posible nacionalización de su filial YPF por parte del Gobierno argentino. El ministro de Exteriores ha advertido que la medida sería "una agresión a España" y ha pedido por vía diplomática una solución dialogada. Además, ha recabado "el apoyo" de los aliados de la UE y el G-20.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, trasladó el viernes al embajador argentino en España, Carlos Bettini, "la preocupación del Gobierno español" ante la posible nacionalización de YPF, filial de Repsol. En un encuentro celebrado a petición del ministro y calificado por él de "respetuoso", este comunicó al embajador que "cualquier agresión" contra la seguridad jurídica de la petrolera española se considerará "una agresión al Gobierno", en línea con lo manifestado el día antes por el titular de Industria, José Manuel Soria. El Ejecutivo se reserva la adopción de las medidas que crea oportunas.
Margallo desveló que el Gobierno español "ha pedido el apoyo de sus aliados", en referencia a los países de la Unión Europea y otros del G-20, como Estados Unidos y México. "YPF es importante para Repsol y Repsol es importante para España", según el titular de Exteriores. Dijo entender la preocupación del Ejecutivo que preside Cristina Fernández de Kirchner sobre "la cuestión energética", pero que la obligación de España es defender los intereses de sus empresas. Margallo aseguró que la UE ha mantenido contactos con el Gobierno argentino y que en la Cumbre de las Américas que se celebra este fin de semana en Colombia, a cuya canciller se ha remitido una carta, se tratará también la cuestión.
El ministro hizo referencia a las distintas versiones que han circulado sobre un proyecto de ley de expropiación, que no ha sido tramitado aún en el Parlamento argentino. De hecho, quiere aprovechar "este impasse" para reconducir la situación apelando "al diálogo y el sentido común". Aunque no quiso avanzar qué medidas concretas aplicaría España en "el peor de los escenarios", sí subrayó que "no estamos hablamos solo en términos económicos", en referencia a algún tipo de embargo a productos del país andino. "No sería solo en términos económicos, sino en términos de una relación fraternal de muchos años". En este sentido, recordó el "socorro" que España dio a Argentina (un préstamo de mil millones de dólares) durante la crisis del corralito en 2001.
Una posible ruptura no sería "solo en términos económicos", advirtió Margallo
Margallo se refirió a los múltiples contactos que el Gobierno español ha mantenido con el argentino ("casi a diario") desde que se desencadenó la crisis de YPF tras las exigencias de inversión por parte de Argentina; de revocación del reparto de dividendo; de imposición de precios de carburantes, y la rescisión de licencias en varias provincias del país.
Asimismo, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, advirtió el viernes que el Gobierno defenderá "con todos los instrumentos a su alcance" los "intereses generales" de España en Argentina en el caso de que el Gobierno argentino expropie YPF.
Repsol también recibió apoyos en muchos otros ámbitos políticos. La secretaria general del PSOE, Elena Valenciano, apeló a la responsabilidad y sensibilidad de Kirchner y de su Gobierno para buscar una solución al problema y dijo que su partido apoyará todas las gestiones del Gobierno "para salvar la situación" de YPF.
Por su parte, la Comisión Europea declaró el viernes su respaldo a España en el litigio con Argentina. "Nos ponemos del lado de España en esta situación", declaró el portavoz comunitario Olivier Bailly en una rueda de prensa en Bruselas.
Brufau regresa con la crisis aún abierta
El Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner sigue sin decir esta boca es mía. De hecho, oficialmente, nada ha reconocido desde que se desencadenó la crisis de YPF a comienzos de este año. El presidente de Repsol, Antonio Brufau, que se ha pasado casi toda la semana en Buenos Aires, regresó el viernes a Madrid sin que se haya resuelto (ni dejado de resolver) la crisis que vive la filial YPF, amenazada por el fantasma de una nacionalización.Solo la prensa local ha dado cuenta de un proyecto de ley de expropiación del que, como reconocen todos, han circulado varias versiones. Ninguna de ellas ha sido tramitada en el Parlamento argentino y de ninguna habló Kirchner en su comparecencia televisiva del jueves.La versión más negativa para Repsol apunta a una nacionalización de la mitad de las acciones más una de YPF, que se correspondería con el 25% que tiene el grupo local Petersen y un 25% del 57% propiedad de Repsol. Sea como sea, la presidenta argentina se ha ido a la Cumbre de las Américas sin tomar una decisión. Se desconoce si por las presiones del Gobierno español o porque no quiere enfrentarse en Colombia a Estados Unidos o México, con los que mantiene también pleitos comerciales.
En Bolsa
2,73% fue la bajada en Bolsa de Repsol el viernes, que cerró en 17,47 euros por acción. El Ibex se desplomó un 3,6%.3,33% fue la caída registrada el viernes por las acciones de YPF en la Bolsa de Buenos Aires.
Las claves de una crisis
DIVIDENDOS Hasta noviembre, todo parecía ir viento en popa entre Repsol y el Gobierno argentino. La decisión del consejo de YPF de repartir un 90% de los beneficios en dividendos (algo habitual,pactado en su día con el Gobierno), a lo que se opuso el representante estatal en el consejo, desencadenó el conflicto.BALANZA El año pasado Argentina, donde el consumo de carburantes está subvencionado, sufrió por primera vez un déficit de su balanza energética. Sin autoabastecimiento, pese a sus importantes recursos, y con problemas de suministro, el Gobierno dirigió sus críticas a las petroleras, a las que acusó de no invertir lo suficiente. YPF fue denunciada por problemas de competencia en la venta de gasolinas.CONFLICTO Sin que el Ejecutivo de Cristina haya confirmado oficialmente hasta ahora ninguna de las noticias sobre una posible expropiación, estas han circulado desde que comenzó el año. Las filtraciones de un decreto de nacionalización ha hecho saltar las alarmas esta semana, pero, pese a ellas, la presidenta sigue sin confirmar ni desmentir nada.DIPLOMACIA El temor fundado de que Argentina estudia a fondo alguna medida expropiatoria ha desatado un conflicto diplomático: el ministro de Industria acusó de hostilidad al Gobierno Kirchner y alertó de las ¢consecuencias¢ de una nacionalización de YPF.VACA MUERTA Hay quien sospecha que el interés repentino de Argentina de recuperar la petrolera nacional está relacionada con el importante descubrimiento de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, en la Patagonia.
