Los inversores extranjeros venden 54.000 millones de deuda española en tres meses
A los inversores extranjeros cada vez les gusta menos la deuda española. Han vendido 53.500 millones desde finales de noviembre. Los responsables de la mejora del rendimiento de la deuda nacional han sido exclusivamente los bancos españoles.
¿Ha vuelto la confianza al mercado español de deuda? ¿Los inversores extranjeros vuelven a comprar letras, bonos y obligaciones del Tesoro? La respuesta a la primera pregunta depende: la confianza ha vuelto pero solo de los inversores nacionales. La contestación a la segunda cuestión es meridianamente clara: no.
Las últimas estadísticas del Tesoro revelan que la cartera registrada (cartera a vencimiento ajustada de operaciones temporales y simultáneas) de deuda pública de inversores extranjeros se redujo en febrero hasta los 244.595 millones de euros. El descenso respecto a finales de noviembre es de 53.538 millones o, lo que es lo mismo, del 18%.
Curiosamente, la prima de riesgo española -medida como el diferencial de rentabilidad entre los bonos español y alemán a 10 años- ha mejorado notablemente desde finales de noviembre, cuando rozaba los 400 puntos básicos. Hoy se sitúa en el entorno de los 340 puntos básicos y ha llegado a perder el nivel psicológico de los 300 puntos el pasado febrero.
Las megasubastas de liquidez del Banco Central Europeo (BCE), celebradas los pasados 22 de diciembre y 26 de febrero, han surtido efecto, rebajado los costes de financiación de España. Pero está claro, a tenor de los datos, que solo los inversores nacionales están convencidos del interés como inversión a largo plazo de la deuda soberana española.
Las entidades de crédito españolas han más que duplicado su cartera de deuda pública desde finales de noviembre. Entonces, contaban con 70.309 millones de euros, cuando a cierre de febrero tenían 142.274 millones de euros. En términos absolutos, son casi 72.000 millones más.
El dinero solicitado al BCE por la banca española en febrero ascendía a 152.432 millones de euros, según la media mensual de datos diarios -es decir, no recoge el importe total al cierre-, cuando en noviembre era de 97.970 millones de euros. Son 54.462 millones más que, según se deduce de los datos del Tesoro, se han destinado íntegramente a comprar deuda pública.
Por vencimientos, los inversores extranjeros han vendido 15.836 millones de euros en letras y 37.702 millones en bonos y obligaciones. Mientras tanto, los bancos españoles han comprado 12.392 millones de euros en letras y 59.573 millones en deuda a medio y largo plazo.
Otros inversores que han confiado en el porvenir de la deuda nacional son las administraciones públicas, que a cierre de febrero ostentaban 80.044 millones de euros, un 30,6% más que los 61.310 millones de finales de noviembre.