Berlín apoya mantener operativos de forma paralela los dos fondos de rescate
El Gobierno alemán defendió hoy su postura de mantener operativos de forma provisional y paralela los fondos de rescate temporal y permanente, a dos días de que se aborde y decida esta cuestión en el Ecofin informal de Copenhague.
La portavoz del Ministerio germano de Finanzas, Marianne Kothé, afirmó en un encuentro rutinario con medios de comunicación que la propuesta alemana -similar a la menos ambiciosa de las tres planteadas por la Comisión Europea (CE)- apuesta por mantener "por un cierto tiempo" y "en paralelo" los dos instrumentos de ayuda financiera.
Así, la Unión Europea (UE) dispondría de un cortafuegos de más de 700.000 millones de euros, explicó, al combinar los 500.000 millones del permanente Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) con los 200.000 millones ya comprometidos para Grecia, Portugal e Irlanda del temporal Fondo Europeo de Estabilización Financiera (FEEF).
Esto significaría, aunque la portavoz de Finanzas no lo aclaró, que la capacidad efectiva del cortafuegos sería de 500.000 millones de euros -ya que el resto están comprometidos- y que los 240.000 millones del FEEF que no están incluidos en ningún programa de ayuda serían cancelados.
Kothé opinó que ésta es "una solución sostenible y convincente" y el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert, aseguró en este mismo encuentro que así se logrará un "fondo de rescate creíble".
En contra de la propuesta alemana están muchos países de la UE y organismos multilaterales, que han exigido que el cortafuegos europeo se eleve hasta el billón de euros, para poder rescatar, si fuese necesario, a grandes economías como Italia y España.
Alemania se ha cerrado en banda desde el primer momento a elevar la capacidad del fondo de rescate porque, como primera economía europea, se vería obligada a incrementar su contribución, lo que lastraría su presupuesto.
Seibert argumentó a este respecto que en algunos círculos "ninguna cifra parece suficiente" y destacó que desde diciembre se ha percibido un cierto relajamiento de las tensiones en los mercados financieros para muchos países.
Seibert explicó, asimismo, que en el Ecofin (Consejo de Economía y Finanzas de la UE) de Copenhague también se abordará el asunto del impuesto a las transacciones financieras u otras "alternativas" a este gravamen a nivel comunitario y descartó la posibilidad de introducirlo tan sólo en Alemania.