Botín se viste de largo para el inversor de EE UU
Santander saca sus galas ante lo más granado de la prensa estadounidense, solo una semana antes de la celebración de su junta de accionistas. La revista Fortune acaba de publicar un extenso reportaje sobre el primer banco español. Y la entidad cántabra no ha escatimado en recursos para seducir a una publicación con acceso directo a los círculos de poder más selectos. En sus páginas aparecen todos los altos ejecutivos de la casa: Emilio Botín, Alfredo Sáenz, Matías Rodríguez-Inciarte y Ana Patricia Botín.
Uno de los temas que aborda el artículo es la sucesión al frente del grupo. Su presidente, Emilio Botín, tiene 77 años. El directivo afirma que "el consejo de administración tiene una idea de qué personas pueden tomar las riendas. No queremos ser como otros bancos, que lo anuncian con dos años de antelación". Botín heredó el negocio de su padre y su hija Ana Patricia dirige las operaciones del banco en el Reino Unido, tras abandonar en noviembre de 2011 su puesto como presidenta de Banesto.
El reportaje hace un repaso a la política de adquisiciones emprendida por la entidad radicada en Boadilla del Monte (Madrid). También elogia su vocación por la banca minorista y ratios de eficiencia. Botín reconoce a Fortune que Santander se ha propuesto aumentar su beneficio un 50% en los próximos dos años. La publicación alaba la marcha del grupo ante la recesión económica, sobre todo cuando se la compara con sus pares internacionales.
Pero la revista tampoco obvia los temas espinosos que han implicado a Santander o sus gestores en los últimos años. Hace mención explícita a la exposición al sector inmobiliario español del grupo, las elevadas exigencias de recapitalización impuestas por la Autoridad Bancaria Europea (ABE) a Santander, la regularización extraordinaria ante Hacienda de ciertas inversiones de la familia Botín en Suiza o el indulto aprobado por el Gobierno socialista saliente al consejero delegado, Alfredo Sáenz.
En lo que va de año las acciones de Santander suben el 5% y el viernes cerraron los 6,036 euros.