La confianza de los españoles cae bajo niveles de Lehman Brothers
El indicador de confianza en la economía de los españoles que elabora el CIS ha retomado en febrero su senda bajista, y ya se sitúa por debajo del registrado en el peor momento de la crisis financiera.
Oficialmente, España está a punto de recaer en recesión técnica, lo que dibuja la temida salida en W de la crisis económica. Pero todo parece indicar que la segunda V va a ser aún más dura que la primera. Esa es, al menos, que tienen los españoles según la última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas.
El indicador de situación económica se situó en febrero en 16 puntos, 1,5 menos que en enero y el valor más bajo desde que el CIS iniciara la serie, en 1996. No solo el más bajo, sino que se sitúa muy por debajo de los registrados en el momento más álgido de la crisis financiera global: en octubre de 2008, un mes después de que la caída de Lehman Brothers pusiera en jaque el funcionamiento de la economía de todo el planeta, el índice alcanzaba todavía los 29,6 puntos.
También el índice de confianza económica, que recoge las expectativas respecto al futuro, se sitúa en mínimos: el reciente cambio de Gobierno propició un pequeño avance, desde el 27,5 de octubre de 2011 hasta el 31,3 de enero de este año, pero en febrero se ha producido una nueva inflexión bajista, hasta los 28,4 puntos. También en este caso, el indicador vigente es inferior al que se registraba a finales de 2008.
El paro es un problema directo para la mitad de los españoles
La encuesta del CIS sitúa el paro como el principal problema del país, con un 84% de respuestas. A su lado, palidece el que en otros tiempos era el mayor foco de preocupación: el terrorismo solo es sugerido por el 1,7%. Pero el desempleo ya ha dejado de verse como un mal genérico. El 48% de los encuestados se declara personalmente afectado por el mismo (aproximadamente, el doble de la tasa de paro según la EPA).
Seis de cada diez españoles creen que la situación económica es peor que hace un año, y uno de cada tres piensa que dentro de 12 meses será aún peor (solo hay un 18% de optimistas en este caso).
Según la citada encuesta, un tercio de los españoles estaría dispuesto a cambiar de ciudad para encontrar trabajo, un 27% se desplazaría a otro país de la Unión Europea y un 21% viviría fuera de la UE con ese objetivo. En el caso de los parados, los porcentajes se elevan hasta el 54,6%, 41% y 29,5%, respectivamente.