España se ha convertido en el país de la OCDE donde más ha crecido el desempleo durante 2011, con un incremento de 2,5 puntos, hasta llegar al 22,9%, lejos de la media del 8,2% de los países de la OCDE. El Gobierno de Mariano Rajoy presentó la semana pasada una reforma que "marcará un antes y un después" y que abre la vía a un despido más rápido y barato.
La encuesta revela que el 64% de los españoles prevé que sea a partir de 2013 cuando se creen puestos de trabajo, si bien para el 20% de los entrevistados no será tan sencillo. Solo el 16% de los españoles ve el futuro a corto plazo de manera positiva con creación de empleo a partir de los últimos meses de 2012, cuando el mercado laboral empiece a dinamizarse.
El director de Relaciones Institucionales y Laborales de Randstad, Luis Pérez, ha destacado que para el sector de las empresas de trabajo temporal lo más positivo de la reforma laboral es que se reconoce la labor de estas empresas como un potente agente dinamizador del mercado de trabajo.
"La norma que se acaba de aprobar nos permitirá a las agencias de colocación colaborar con los servicios públicos de empleo para luchar contra el desempleo", ha destacado Pérez. "Este hecho es capital si se compara a España con otros países de nuestro entorno, ya que en aquellos sitios donde nuestra presencia es mayor el desempleo y la temporalidad disminuyen".