Cameron, dispuesto a acabar con las primas de los ejecutivos
El primer ministro británico, David Cameron, está a favor de que los accionistas de las grandes empresas tengan más poderes a la hora de vetar los elevados salarios y los bonus de los altos cargos, sobre todo en momentos de crisis.
En una entrevista publicada en el dominical británico The Sunday Telegraph, el primer ministro británico se ha mostrado dispuesto a poner fin a las abultadas pagas que se aprueban los directivos entre ellos, incluso en casos en que las empresas terminan fracasando.
"El mercado para los altos directivos no está funcionando, tiene que ser resuelto. Demos poderes a los accionistas con la puesta en marcha de un voto directo de los accionistas sobre los paquetes salariales", ha dicho el premier sobre la polémica en el país por la diferencia salarial en las empresas en momentos en que se están recortando empleos y se congelan los sueldos de los empleados.
El Gobierno de coalición entre conservadores y liberademócratas estudia actualmente esta situación y se espera que el titular de Empresas, Vince Cable, presente este año una serie de reformas.
Cameron, que ha aplicado unas fuertes medidas de austeridad para reducir el déficit, considera injusto que los miembros de los consejos de administración reciban altos sueldos mientras el resto del país está obligado a ajustarse el cinturón por la crisis.
"Tenemos que redefinir la palabra 'justo'. Tenemos que intentar darle a la gente la sensación de que vemos esto. (Hay que tener) una economía más justa, mejor, una sociedad mejor y más justa", puntualizó el jefe del Gobierno.
Todos los partidos políticos han expresado la preocupación por los altos salarios de los directivos de empresa incluso cuando éstas no prosperan o registran pérdidas.
Veto al impuesto europeo a las transacciones financieras
El premier ha asegurado este domingo que podría vetar cualquier intento por establecer un impuesto a las transacciones financieras en la Unión Europea porque puede perjudicar el mercado laboral.En declaraciones a la cadena BBC, Cameron ha asegurado que Francia, Alemania y otros países europeos pueden fijar esta tasa dentro de sus propias fronteras, pero se opondrá si es a nivel de la UE.Según el jefe del Gobierno británico, imponer un impuesto de este tipo -más conocido como 'tasa Tobin'- en toda la Unión sin que se apliquen medidas similares en otros lugares del mundo puede perjudicar el mercado laboral europeo y la prosperidad del continente.Francia se ha mostrado a favor de establecer esta tasa en el país y quiere sacar adelante legislación para aplicarla. "Si los franceses quieren seguir adelante con el impuesto a las transacciones en su propio país, entonces son libres de hacerlo", afirmó el primer ministro británico.Pero dijo que vetará "la idea de una nueva tasa europea cuando no se aplique el impuesto en otros lugares" del mundo.El presidente francés, Nicolas Sarkozy, hizo la propuesta de la tasa el pasado viernes y quiere introducir legislación antes de las elecciones presidenciales en Francia en abril.