El capital de La Sexta en la fusión con Antena 3 dependerá de los beneficios
Antena 3 ha confirmado a la CNMV que negocia los términos de su fusión con La Sexta, pero recuerda los fracasos que ha tenido en este empeño en el pasado.
¿A la enésima va la vencida? Todo apunta a que ni Antena 3 lo tiene claro. Las negociaciones con La Sexta están en su punto álgido y el mercado descuenta que, esta vez sí, habrá fusión entre las dos cadenas de televisión. La CNMV también lo ha entendido así y ha suspendido la cotización de Antena 3, pero la comunicación enviada por esta compañía al regulador no oculta el escepticismo reinante: "Estas negociaciones se enmarcan, en todo caso, en el contexto de un proceso que ha experimentado interrupciones y suspensiones en anteriores ocasiones, sin que de momento se haya adoptado ningún acuerdo formal por los órganos de administración de ambas compañías", dice la nota oficial a la CNMV, que ha suspendido la negociación de Antena 3 en Bolsa durante cerca de una hora esta mañana a la espera de noticias.
Con los matices que sean, el comunicado de Antena 3 confirma que las negociaciones están muy avanzadas. Tal y como informa hoy Cinco Días, será una fusión por absorción en la que los accionistas de La Sexta nunca tendrán más de un 14% del capital del grupo resultante. Y solo se llegará a esta participación si se cumplen determinados objetivos de beneficios en el futuro, porque de entrada su porcentaje será menor.
No era un secreto para nadie, pero estos datos constatan que La Sexta llegará a la fusión en condiciones mucho peores de las que se pactaron hace dos años, cuando se planteó una integración que nunca llegó a concretarse. Ahora, la cadena dominada por Planeta tendrá una participación mucho mayor en el grupo resultante, a medida que los resultados y la deuda de La Sexta han ido empeorando.
Esta situación ha llevado a La Sexta a un punto en que necesita la fusión con Antena 3 casi al precio que sea, mientras que la cadena de Plantea busca aumentar sus poderes para competir con Mediaset, sobre todo tras la integración entre Telecinco y Cuatro hace justo dos años. Ahora está en una posición de fuerza. Eso no significa que las negociaciones no sean complicadas, con muchos intereses que cuadrar y sensibilidades que abordar, de ahí la alerta de Antena 3 de que no se puede cantar victoria hasta que todo esté cerrado y rematado.
Pese a estas cautelas, la fusión se percibe inminente en el mercado, hasta el punto de que se calculan horas o, como mucho, días para el anuncio definitivo.