La nave espacial del cofundador de Microsoft
De los sistemas operativos a las naves espaciales. El cofundador de Microsoft, Paul Allen, invertirá 200 millones de dólares de su bolsillo (unos 153,5 millones de euros al cambio actual) en la construcción del que será el mayor transbordador espacial, capaz de poner satélites en órbita y transportar personas y mercancía.
Paul Allen, de 58 años, espera que su nueva compañía -llamada Stratolaunch Systems- pueda lanzar cohetes no tripulados desde un avión de transporte en vuelo que lleven cargas gubernamentales y comerciales al espacio y regresen, y con el tiempo evolucionar hacia misiones espaciales tripuladas.
La iniciativa se da pocos meses después de que Estados Unidos retiró el programa de transbordadores espaciales tras 30 años, lo que abre la puerta a empresas privadas para abastecer a los vehículos espaciales.
El cohete de Allen se lanzará desde un avión de transporte masivo impulsado por seis motores de avión jumbo, que serán construidos por Scaled Composites, una unidad del contratista de defensa Northrop Grumman Corp.
El mismo será hecho por la empresa espacial privada SpaceX, fundada por Elon Musk, el multimillonario cofundador de PayPal. El primer vuelo de prueba está previsto dentro de los cinco años de iniciado el programa.
Allen, que aparece en el puesto 57 de la lista de personas más ricas del mundo de la revista Forbes con una riqueza total de 13.200 millones de dólares, es otro de los multimillonarios con intereses en la privatización de los viajes espaciales.
Sus ambiciones espaciales lo ubican al lado del fundador de Musk y Amazon.com, Jeff Bezos, cuyo proyecto Blue Origin tiene como objetivo poner a la gente en el espacio a un precio asequible. Virgin Galactic, de Richard Branson, también está buscando transportar pasajeros al espacio suborbital.
Allen, que creó el nombre de Microsoft, fundó en 1975 la que se convirtió en la mayor compañía mundial de software con Bill Gates. Dejó Microsoft en 1983 mientras lidiaba su primera batalla contra el cáncer. Allen también es copropietario junto con George Soros de Transmeta, un fabricante de chips.