Vega Sicilia, un tesoro lleno de joyas antiguas
El paso de los años reafirma la grandeza y la leyenda de estos caldos
Vega Sicilia. æscaron;nico 2004. Un vino que no saldrá a la venta hasta 2014, a un precio de 220 euros. Y todavía estará en su mejor momento en la siguiente década. "Esto demuestra que todo el ciclo de nuestro vino es perfecto, es la mejor expresión de una región noble", afirma Javier Ausàs, enólogo de la bodega vallisoletana. La histórica bodega celebró hace unos día una cata vertical con una decena de vinos, organizada por la Fundación para la Cultura del Vino en Madrid, con la que se pretendía demostrar el carácter perpetuo de Vega Sicilia, compañía con 150 años de historia (desde hace tres décadas en manos de la familia de David Álvarez, presidente del grupo Eulen). "Nuestro vino tiene carácter, es elegante y cuenta con un gran acabado en botella", asegura el director técnico de los vinos.
El terreno donde se crían las uvas de Vega Sicilia tiene una extensión de mil hectáreas, de las cuales solo 200 se destinan a la viña. El 70% va a æscaron;nico y Valbuena, y el resto a Alión. Las 800 hectáreas que quedan están ocupadas por cultivos y bosque de alcornoques y pinos, porque no tiene utilidad para plantar uva. "Desde 1998 nos hemos dedicado a profundizar en el estudio de los terrenos que son los que le dan carácter a nuestros vinos, æscaron;nico y a Valbuena", asegura Ausàs, que aprovecha para aclarar que Valbuena no es la segunda marca de Vega Sicilia. "Es la versión juvenil, sale en su quinto año de terruño, y es un vino estricto. Cuando no sacamos æscaron;nico porque la cosecha no ha sido buena, utilizamos toda la uva para Valbuena".
Precisamente, a través de las notas de cata se recibe la suficiente información para comprobar la grandeza de estos caldos. Aguantan el paso del tiempo, así se demostró con el descorche del mítico 1942, como si no fuera con ellos. O la elegancia que demuestra todavía el ejemplar de 1967.
Por ejemplo, æscaron;nico 2004 es un caldo que refleja la "máxima expresión de un vino femenino, complejo, que todavía tiene alguna imperfección y que pulirá todas sus aristas en la botella". El enólogo también señala que a Vega Sicilia le gusta la madurez, pero no el exceso de ella ni los verdores.
El æscaron;nico de Vega Sicilia es, probablemente, el vino tinto que más tiempo pasa en crianza del mundo. Desde su elaboración hasta su salida al mercado pasan diez años, de los que al menos tres reposan en botella, y el resto en depósitos y barricas de roble. Los nombres de Valbuena 5o (tempranillo), Vega Sicilia "æscaron;nico" (tempranillo, cabernet sauvignon, merlot y malbec) o Vega Sicilia "æscaron;nico" Reserva Especial (un vino que no lleva añada) encierran algunas de las mejores joyas del panorama vinícola mundial.