La UE advierte al PP que debe seguir con los ajustes iniciados por Zapatero
Los líderes de las instituciones europeas, pertenecientes todos ellos al Partido Popular Europeo (PPE), felicitaron ayer su correligionario Mariano Rajoy por su victoria el electoral del pasado domingo. Pero acto seguido advirtieron al futuro presidente del Gobierno español que deberá continuar con la agenda de ajustes presupuestarios y reformas estructurales marcada desde el año pasado por la Unión Europea. "Nos enfrentamos a uno de los periodos más exigentes de las últimas décadas y hará falta que se tomen decisiones importantes", señalo el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, en su mensaje de felicitación al líder de Partido Popular español.
El presidente del Eurogrupo (formado por los ministros de Economía de la zona euro), Jean-Claude Juncker, aseguró, en relación con los relevos gubernamentales en Atenas y Madrid, que "los cambios de Gobierno no alteran la problema situación". Y añadió que "depende del nuevo Gobierno griego y del nuevo Gobierno español el dar pasos de consolidación creíble para que la situación se tranquilice".
Rajoy también conversó ayer telefónicamente con la canciller alemana, Angela Merkel, cuyo portavoz auguró que Berlín continuará teniendo con España una relación "estrecha" y "de colaboración".
Rajoy tiene previsto reunirse con Merkel y el resto de líderes del PPE en la cumbre que ese partido celebrará en Marsella el 8 de diciembre. La cita podría convertirse en un Consejo Europeo paralelo al que al día siguiente se celebrará en Bruselas con un Rodríguez Zapatero como presidente en funciones. En Marsella, Rajoy podría presentar sus planes de Gobierno a las instituciones europeas y a gran parte de los Gobiernos de la UE.
La vigilancia será mucho más estrecha
La llegada de Mariano Rajoy a La Moncloa coincide con un endurecimiento de la vigilancia comunitaria sobre los países que, como España, sufren inestabilidad financiera. La CE tiene previsto aprobar mañana un proyecto de reglamento, al que ha tenido acceso CincoDías, que permitirá a Bruselas exigir a un país que comunique periódicamente "información desagregada sobre la situación de las entidades financieras". Bruselas también podrá supervisar la labor del reguladores como el Banco de España. Y por mayoría cualificada se podrá intervenir un país aunque no pida rescate.