Bruselas ataca el epicentro de la especulación con la deuda soberana
El Parlamento y el Consejo Europeos acordaron hoy endurecer las normas para la venta en corto al descubierto de acciones y bonos y prohibir las transacciones al descubierto de los seguros de impago vinculados a la deuda soberana, aunque dejan abierta la posibilidad de suspender esa restricción.
La Eurocámara, el Consejo y la Comisión Europea han llegado a este compromiso tras una larga jornada de negociaciones sobre una nueva legislación que regulará las ventas en corto y los llamados credit default swaps (CDS), derivados que cubren el riesgo de una suspensión de pago de un país o de una compañía.
En el caso de la venta de los CDS al descubierto en el mercado de la deuda soberana, estos se intercambian sin que los inversores tengan los bonos correspondientes, por lo que se benefician de la cobertura sin estar expuestos realmente al riesgo de un impago.
La prohibición se aplicará a ese caso cuando el comprador de un seguro está "al descubierto" o "desnudo" por no estar expuesto a ningún riesgo frente a la deuda soberana o frente a activos cuyo valor está relacionado con deuda soberana.
Solo fue posible alcanzar un acuerdo al dejarles a los estados miembros la posibilidad de "salirse" de esa prohibición previa autorización de la ESMA y solo bajo casos claramente y objetivamente definidos, explicaron en rueda de prensa el comisario para el Mercado Interior, Michel Barnier, y el eurodiputado de los Verdes y autor de la legislación, Pascal Canfin.
Entre las justificaciones figuran las situaciones en las que el mercado de deuda soberana "no funciona adecuadamente" y cuando la prohibición pueda tener un impacto negativo en los CDS soberanos.
También valdrá alegar que sube o que ya está demasiado alto el interés sobre la deuda soberana, o bien que la restricción afecte a la cantidad de bonos que pueden ser negociados, entre otros aspectos.
La ESMA tendrá 24 horas para autorizar o denegar la petición.
El levantamiento de la prohibición será temporal, ya que solo podrá ser aplicado durante un máximo de 12 meses, renovables por periodos de hasta seis, si las tensiones permanecen.
Además, se establecen excepciones para los operadores primarios y los creadores de mercados.
Si la regulación es aprobada por el pleno del Parlamento y el Consejo, la regulación entrará en vigor el 1 de noviembre de 2012.
Barnier se mostró satisfecho con el acuerdo y sostuvo que el hecho de que se haya alcanzado este compromiso antes de la Cumbre de líderes refleja que "estamos preparados para actuar".
La regulación pactada hoy aumenta la transparencia sobre posiciones en corto mantenidas en ciertos valores de la Unión Europea y asegura que los estados miembros tengan poderes claros para intervenir en situaciones excepcionales, con el fin de reducir los riesgos sistémicos y para la estabilidad financiera y la confianza en los mercados.
Para la venta en corto al descubierto de acciones, el acuerdo prevé que se tenga que informar de las posiciones cortas al regulador y, en ciertos casos, al mercado.
Además, con el fin de poder vender en corto, tanto en el caso de acciones como de deuda soberana, un inversor tiene que tener prestado el instrumento financiero afectado, haber entrado en un acuerdo para prestarlo o tener un pacto con una tercera parte en virtud del cual ésa confirme que la acción está localizada y que ha tomado medidas para que el inversor pueda tener "expectativas razonables" de que se ejecutará el acuerdo.
En el caso de los bonos soberanos, habrá un régimen específico para las notificaciones a los reguladores, y ésas se tendrán que hacer solo si existen posiciones netas importantes en bonos soberanos de la UE.
El texto otorga además más poderes a la Autoridad Europea de los Mercados de Valores (ESMA, en inglés) y a las autoridades nacionales competentes para imponer medidas temporales si hay una gran caída en el curso, como restringir la venta en corto y transacciones con CDC.