El responsable de eléctricos de Renault pide a los gobiernos mantener las ayudas
Simón Luque dijo que hasta que no se consiga un equilibrio de costes y gastos en el desarrollo de los vehículos eléctricos, "las ayudas de los gobiernos son indispensables".
Luque reconoció, en una entrevista a Efe, que muchos gobiernos, entre ellos el español, ya ha puesto en práctica estas ayudas, pero recordó que la industria del automóvil se rige por criterios de volumen y hasta que no se alcance una masa crítica en el mercado no se pueden retirar.
La perspectiva de este tipo de movilidad eléctrica, Luque la enfoca como "una fórmula de transporte adicional a la que tenemos hoy".
Añade, en este sentido, que "estamos saliendo de un sistema en el que la única forma de movilidad es el coche térmico y entrando en una era en la que población se incrementará notablemente en las ciudades y no se podrán incorporar más coches en los centros urbanos".
Para Luque, de origen español, los grandes núcleos urbanos empiezan a adoptar formas diferentes de movilidad limpia a través de tranvías, autobuses ecológicos, bicicletas y el vehículo eléctrico no se va a desvincular de ese entorno, de ahí su visión optimista respecto a este tipo de coche.
Anticipa que la tecnología se desarrollará de forma importante en los próximos años y el mayor problema percibido, el de la autonomía de estos vehículos, "será superado de forma definitiva muy pronto".
El responsable de esta división de la marca del rombo no quiso formular plazos concretos sobre la superación de ese lastre, pero anticipó que el modelo ZOE, que llegará a los mercados en el plazo de un año, va a tener una autonomía superior a la del Kangoo y el Fluence, que se calcula entre 170 y 185 kilómetros en el ciclo mixto.
También advierte de mejoras en otro talón de Aquiles del vehículo eléctrico, como el precio de las baterías, si bien puntualiza Luque que el sistema dominante de ion-litio tiene bastantes años por delante ya que está en fase inicial.
Simón Luque también se ha mostrado convencido de que el vehículo eléctrico y el convencional tienen todavía tiempo por delante para convivir, pues los cálculos de Renault se asientan en un mercado mundial del 10 % de este tipo de vehículos en el horizonte de 2020.
"El 90 % -según Luque - serán térmicos que habrán mejorado notablemente sus rendimientos y reducido las emisiones y así estará estructurada esa convivencia durante un periodo de 10 ó 15 años".
Luque descarta que detrás del coche eléctrico exista un oportunismo político, alejado de la realidad de la industria y de las preferencias reales de los usuarios.
En este sentido, matiza que "la política se conecta con la salud pública, pues el mundo está creciendo, los parques automovilísticos aumentan y prevenir los perjuicios que pueden generar es labor del político".
Por ello defendió que detrás del vehículo eléctrico "hay una base científica fuerte, con adelantos importantes en la tecnología y la química de las baterías y van a venir más. Renault ha fundado una estrategia construida en torno a esta tecnología".
Este experto en movilidad eléctrica eludió concretar nuevas estrategias a partir de 2013 de la marca francesa que sigan a la actual gama de modelos eléctricos: Fluence, Kangoo, Twyzi y ZOE.
Sobre estos modelos, la prioridad es una comercialización masiva e infundir entre los usuarios el uso cotidiano y, en cuanto al Twyzi, que se producirá en la planta de Renault en Valladolid, indicó que se iniciará la fabricación en diciembre y se comercializará poco después.
De este original modelo, Luque aseguró que "es una apuesta fuerte de Renault, pues es un concepto que va a cuajar en un segmento de población que se estaba alejando del coche térmico, ya que ofrece una movilidad muy cercana a la del scooter, pero al mismo tiempo una habitabilidad y una conducción propia de automóvil".