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De las 168 existentes

Baleares elimina 92 empresas y prevé 800 despidos para ahorrar 115 millones

Según el presidente José Ramón Bauzá, con esta medida se pagará en dos años la deuda de 247 millones de euros que actualmente tiene el Govern balear con los proveedores de la comunidad.

El presidente del Govern balear, Jose Ramón Bauzá, ha anunciado hoy la eliminación de 92 de las 168 empresas públicas de la comunidad autónoma para lograr un ahorro anual de 115 millones de euros, medida que podría causar el despido de 800 contratados laborales de la Administración autonómica. En una comparecencia pública, Bauzá ha desvelado hoy parte del plan de racionalización del sector público instrumental del archipiélago, que prevé que las empresas de la comunidad se reduzcan hasta las 76.

Con este ahorro anual de "19.000 millones de pesetas", ha querido especificar Bauzá, se pagará en dos años la deuda de 247 millones de euros que actualmente tiene el Govern balear con los proveedores de la comunidad. El presupuesto anual del sector público instrumental, en el que no se incluye al Servicio de Salud de Baleares, alcanza los 450 millones, por lo que el recorte del gasto previsto en consorcios, fundaciones, entes instrumentales, organismos autónomos y sociedades mercantiles es del 25 %.

En la comparecencia informativa, el director de la Oficina de Control Presupuestario del Govern, Joaquín García, ha avanzado que esta medida podría suponer el despido de hasta 800 contratados laborales de las empresas públicas afectadas por el plan de ajuste. No obstante, se analizará la salida de estos trabajadores caso por caso y empresa por empresa. El Ejecutivo autonómico descarta el despido de personal interino, aunque no se harán nuevos contratos. A partir de enero de 2012 el número de consorcios públicos pasa de 107 a 30, de 26 a 18 las fundaciones y de 28 a 21 las empresas públicas y sociedades mercantiles, mientras que se mantienen los 5 organismos autónomos, la Agencia Tributaria y el Ib-Salut. En el caso del Servicio de Salud de las Islas Baleares, la empresa pública Gesma y las fundaciones de los hospitales de Son Llàtzer, Inca y Manacor desaparecen.

El presidente balear ha reconocido que no ha sido fácil tomar una decisión de este tipo, pero se ha mostrado convencido de que "hay que tomar soluciones" ante la grave crisis económica y la difícil situación financiera de las arcas públicas, al tiempo que ha insistido en que el encargado de generar empleo debe ser la iniciativa privada y no el sector público. También ha dicho que no hay ningún tipo de motivación política en este recorte que responde a la necesidad de "adelgazar" la administración pública, lo que generará confianza en los inversores privados, las entidades bancarias y el Gobierno central.

Una actuación que generará esta complicidad con el sector privado, ha manifestado el presidente, es el compromiso del Govern de abonar en dos años el dinero que adeuda a los proveedores o la autorización de hace unos días del Consejo de Ministros a solicitar crédito o emitir deuda pública hasta un importe máximo de 209,5 millones de euros. Preguntado sobre la elevada pérdida de puestos de trabajo en la administración pública, Bauzá ha respondido que "no puede ser" que la función del sector público sea la creación de empleo y se ha mostrado "convencido" de que la iniciativa privada generará esos empleos y muchos más.

Respecto a la cuestión de si la responsabilidad del elevado crecimiento del sector público en los últimos años corresponde al gobierno del PP liderado por Jaume Matas, el presidente ha comentado que le "da igual" el pasado, pero que no es posible "esta maraña" de empresas públicas en un momento de grave crisis económica como el actual.

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