El señuelo de los eurobonos aúpa al Ibex
El alegato a favor de los eurobonos anunciado hoy por el presidente de la Comisión Europea ha insuflado confianza a los inversores. El Ibex prolonga el rebote iniciado ayer y gana un 2,71% para superar los 8.000 puntos. La prima de riesgo se instala en los 350 puntos básicos.
En el ecosistema bursátil hay veces, demasiadas, en que las palabras pesan más que las acciones. Hoy es un claro ejemplo de este mundo al revés. El presidente de la Comisión Europea ha anunciado que propondrá la opción de los eurobonos. Ha sido solo una proyección, casi un deseo. Por otro lado, el Parlamento austriaco ha bloqueado la ratificación del nuevo fondo de rescate. Un hecho con consecuencias reales, de momento el retraso en la implantación del EFSF (en sus siglas en inglés.) Bien, pues los mercados han preferido fijarse más en las intenciones que en los hechos y han afianzado el rebote de ayer con subidas generalizadas superiores al 1%. El Ibex ha avanzado un 2,7% hasta perforar la resistencia de los 8.000 puntos.
En cuanto a los valores más destacados, Mediaset ha logrado un sobresaliente 7%. Le sigue IAG con un 5% e Iberdrola con un 4,8%. En sector financiero también ha mantenido el tipo. Santander y BBVA ha cerrado con subidas de más del 2%.
En el panorama europeo, el Cac parisino merece un comentario aparte. El recorte de rating de Moody's sobre las grandes entidades francesas (rebaja a Société Générale y Crédito Agricole) dejan a las corporaciones financieras galas bastante tocadas, siendo una vez más el centro de las iras. Paradojicamente ha sido BNP, la única de las grandes que no ha sido degradada, la que más se ha hundido hoy con casi un 4% abajo. El índice francés se ha resentido durante las primeras horas de la sesión, pero a medida que avanzaba la jornada y aprovechando las palabras de Barroso, ha recuperado posiciones y ha cerrado más de un 1% arriba.
Pero las agencias de rating no son las únicas que dan disgustos. La confrontación europea bien puede interpretarse como el tradicional conflicto norte-sur. En el caso de la crisis fiscal, la acaudalada Alemania es la punta de lanza de las suspicacias con los periféricos. Pero también está Finlandia, que ha venido exigiendo garantías bilaterales a Grecia antes de abonar su parte de la ayuda. Y el nuevo socio receloso es Austria. La comisión financiera de su Parlamento ha bloqueado hoy la ratificación del fondo de rescate aprobado como parte del segundo rescate griego a finales de julio. Más problemas para la eurozona.
En el mercado de deuda las cosas continúan algo revueltas, aunque mejoran. La prima de riesgo nacional, sobrecoste que paga España por financiarse respecto lo que tiene que abonar Alemania, se sitúa en los 350 puntos. Un castigo que en el caso de Italia sigue acentuándose más con el diferencial trasalpino ensanchado más allá de los 370 enteros. En el caso de Grecia ya no hay comparaciones posibles. Los títulos helenos a diez años ya apagan más de un 25%, porcentaje abusivo que solo puede guardar como explicación que los inversores estén intentando recuperar vía rentabilidad lo que van a perder a través del capital.
Sin embargo, la situación es extremadamente volátil y los operadores se mantienen alerta ante las posibles novedades. Inicialmente no parece que los inversores guarden muchas esperanzas ante la reunión a tres bandas sobre Grecia, pero nunca se sabe. El encuentro, vía conference call, se celebrará esta tarde a las 17 horas GMT (19 horas en España), y supondrá la escenificación de lo que ya ayer adelantaba la canciller alemana Angela Merkel y que sirvió de bálsamo en los parqués europeos: los Gobiernos de la UE no permitirán caer a Grecia, al menos de forma abrupta y desordenada, en un momento en que cobraban nueva fuerza los rumores sobre una quiebra del país. Habrá que ver si estas repetitivas palabras dan como resultado alguna medida concreta.
No ha sido la única cita del día. El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha superado hoy la moción de confianza que se traduce en la aprobación definitiva el último plan de austeridad, que comprende un ajuste presupuestario de unos 54.000 millones de euros. En paralelo, las declaraciones de los líderes políticos no ayudan a tranquilizar. El primer ministro chino, Wen Jibao, ha advertido que las economías occidentales deberían preocuparse más de crear empleo en vez de esperar que China salve el mundo. Reiteró, eso sí, su planteamiento de que China ofrecerá ayuda a Europa invirtiendo en la zona. El lunes se conoció que Italia se reunió con representantes del mayor fondo soberano chino para hablar sobre compras de deuda.
En el mercado de divisas, el euro avanza posiciones ligeramente frente al dólar. El cambio entre las dos monedas se sitúa en 1,370 unidades.